El helicóptero gigante canadiense Chinook, que llegó el domingo a San Pedro para combatir los incendios en la zona de islas, cumplió el lunes su primera jornada de trabajo con casi 500 mil litros de agua arrojada sobre los focos.

El Boeing CH47-D alquilado por el Gobierno nacional por casi siete millones de pesos está en el país desde el 4 de enero, contratado para asistir durante cuatro meses las necesidades del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, que dispuso que trabaje durante estos días en el Delta del Paraná, con asiento en San Pedro.

El director de Defensa Civil municipal, Fabio Giovanettoni, explicó en Radio Cuarentena que tras la primera jornada de trabajo, los responsables del helicóptero canadiense pidieron que durante la mañana se atacaran los focos detectados con el avión hidrante y los brigadistas en terreno, para que la aeronave gigante haga lo propio por la tarde.

Una vez finalizada la tarea de este martes, los canadienses evaluarán la necesidad de continuar en el territorio local, de acuerdo a lo que resulte del trabajo, y si no amerita se retirarán para asistir en servicios que así lo requieran en otros puntos del país.

“Estamos hablando de un helicóptero del primer mundo, uno sabe las características que tiene y cómo trabaja, y que son elementos que no son habituales en Argentna y en Sudamérica, la capacidad de trabajo es realmente importantísima y da un salto muy importante respecto de la capacidad de extinción de los incendios, sumado a lo que se venía haciendo con los brigadistas y los medios que teníamos”, analizó Giovanettoni.

El funcionario explicó que el helicóptero trabaja con una autonomía de combustible de alrededor de dos horas y cuarto, para luego reabastecerse en el Aeroclub. En ese lapso, los brigadistas recorren el terreno para evaluar cómo sigue la tarea.

“En total son seis, siete horas netas. Cada balde que tiran son 10 mil litros. Ayer hicieron 48 disparos sobre dos focos que estaban más cercanos a San Pedro, que prácticamente quedaron extinguidos, y hoy trabajaban en un foco un poco más alejado, con la misma dinámica de trabajo. Son cinco operadores canadienses en el helicóptero y tres en tierra que los asisten”, detalló.

Al comienzo de la jornada, alrededor de las 7.00, hay un sobrevuelo en avión para evaluar el panorama y detectar los focos sobre los que deberán trabajar los canadienses. Cerca de las 9.30, el helicóptero sale con cinco tripulantes, mientras otros tres quedan en el Comando, con las coordenadas establecidas para trabajar sobre lo planificado.

“En la zona donde trabajan no hay brigadistas, estamos tirando 10 mil litros de agua desde una altura de 20 metros, que abarca una zona de 300 metros de largo por 50 de ancho”, indicó del director de Defensa Civil.

Como la carga del balde se hace directamente desde el río, “n menos de 3 minutos cargan y tiran”. Los 48 disparos del lunes fueron efectuados en cuatro horas 45 minutos, “horas reales de trabajo, más el tiempo de carga de combustible y el vuelo final de evaluación”.

“Si tuviésemos el helicóptero 10 días acá, no tendríamos más problemas, pero también entiendo que hay muchos lugares donde se tiene que mover y utilizar, porque para eso fue contratado”, dijo Giovanettoni respecto de la continuidad de la aeronave canadiense en la zona, que será evaluada al final de la tarea prevista pra este martes.

“Ayer bajaron diciendo que fue muy productivo y que la misma dinámica aplicada hoy, más el avión hidrante y los brigadistas, entendían que al cierre del día de hoy podía haber una gran parte controlada. Dependerá de la reunión al final del día, de acuerdo a lo que visualizaron y determinar”, explicó.

Giovanettoni confirmó que evalúan el traslado del Comando Operativo instalado en el Estadio municipal hacia el Aeroclub, algo que, adelantó, se resolverá en los próximos días.

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Incendio en islas