Dieron de alta a Lucas, hijo y nieto de los dos talenses fallecidos por COVID-19
Contento y agradecido, Lucas Rodríguez abandonó esta tarde su habitación en el Hospital local. Allí llegó con su diagnóstico positivo de coronavirus tras haber sufrido primero la pérdida de su abuelo materno, Ricardo Piris, primero, la internación de su mamá después y el deceso de su padre, el conocido pastor evangélico Silvestre "Cacho" Rodríguez: "Quiero que la gente sepa que estamos muy agradecidos, tienen que saber que tenemos una gran gente en salud", dijo esta tarde a La Opinión cuando aguardaba la ambulancia para el traslado y el resto de recuperación. Considera que su fe y la de su familia suplirá las ausencias.
Lucas Rodríguez de 38 años fue dado de alta este domingo tras permanecer varios días internado en el Hospital a causa de la severidad con la que la enfermedad que se llevó la vida de su abuelo primero y de su padre después, lo puso a prueba mientras su madre, María Cristina estuvo también internada en ese mismo centro asistencial producto de su patología asmática previa y desencadenante de la descompensación que sufrió luego de haber contraído la enfermedad.
Ricardo y Sivestre, de 83 y 58 años respectivamente son los únicos dos fallecidos con COVID-19 en el partido de San Pedro y gran parte del resto de la familia también sufrió los contagos derivados con el nexo conocido como "prefecturiano de Ibicuy", pero nada impidió que extremadamente agradecido regresara hoy a su domicilio en Río Tala para culminar su recuperación.
"Todo bien gracias a Dios, yo ya tengo el alta. Estoy esperando a que me vengan a buscar. Mamá está muy bien también, estamos todos bien, me voy a Tala, en la casa voy a estar bien cuidado por las gente de la iglesia. Asi que nada, ahi me van a asistir de la mejor manera y ahí esperaré el alta definitivo". dijo Lucas cerca de las 15 cuando esperaba la ambulancia que lo llevaría de regreso. "Estamos agradecidos con la gente del hospital, la verdad que me traó de la mejor manera, estoy muy bien porque gracias a Dios he evolucionado de la mejor manera y ellos me han ayudado a salir adelante de la mejor manera. Nada más que palabras de agradecimiento", reflexionó sin dejar de evaluar los momentos por los que tuvo que transitar toda la familia.
"La verdad es que fue muy duro, pero bueno, ya está, lamentamos mucho la pérdida de papá y obviamente la del abuelo pero ya está, Dios lo quiso así y nosotros que quedamos tenemos que seguir por nuestros hijos, por nuestros sobrinos, por toda la familia, por todo lo que viene atrás. Y bueno, nada, creo que este es un volver a empezar para toda la familia y agarrarnos más a esa fé que nos ha abrazado desde muy chicos".
Cuando se le preguntó cómo se sentía y que le diría a otros pacientes respondió sencllamente: "Una felicidad enorme invade mi corazón en este momento, saber que tenemos un gran equipo médico que trabaja de la mejor manera y un consejo para la gente; que no se deje estar, que no se deje estar pque esto es un peligro y nada, yo gracias a Dios llamé y me atendieron al toque y puedo decir que me salvaron la vida".
Por último señaló "hay que decir cuando las cosas son malas pero también hay que decir cuando las cosas son buenas. Estoy muy agradecido, con Dios en primer lugar, que es la fuente de toda fuerza, de todo poder, y con el equipo médico que tenemos que demostró estar a la altura de los acontecimientos. Le mando mucha fuerza a la gente que la está pasando y que verdaderamente esto es muy duro, pero creo que lo más fuerte está en la mente y en la buena vibra de la gente que está hablando, que te está llamando a cada rato, que te está tirando palabras de aliento y hay que tener fe. Estoy muy agradecido, en este momento no encuentro palabras para expresar tanta felicidad que encuentro en mi corazón".
El 30 de junio, murió Ricardo Piris, el resultado de su hisopado llegó dos días después y por ello se indicó que su muerte había sido "con" COVID, luego su hija María Cristina fue internada en el Hospital y allí también llegaría Silvestre, su yerno de 58 años a quien se le complicó su situación respiratoria y pese a haber sido trasladado a la terapia intensiva no resistió y falleció. Esa tarde su hijo Lucas cursaba los primeros síntomas de la enfermedad, el 7 de julio llegó su positivo y dos días más tarde su traslado al nosocomio.