Asesinato de Agustín Luna: el tercer crimen relacionado con venganzas cruzadas
El asesinato de Agustín Luna es el tercero de una serie de crímenes relacionados entre sí y con un denominador común: la resolución de conflictos personales a los tiros.
Antes de la medianoche de este domingo, Agustín Luna fue asesinado por Germán “Popy” Sandoval. Hacía cuatro días que había recuperado la libertad en el marco de una condena por homicidio a la que fue sentenciado en 2014, el mismo año que su hermano Jonathan, quien mató a Javier Lovello, el testigo del crimen contra Ramón Lezcano, tío de Sandoval. Una historia de crímenes y venganzas que reúne diversos capítulos enlazados entre sí.
Agustín Luna fue asesinado este domingo y tenía 27 años. El 29 de enero de 2013 tenía 19. Esa noche cometió un asesinato por el que lo condenaron a 9 años de prisión, de los cuales llevaba cumplidos siete y a pesar de que había recuperado la libertad estaba todo el tiempo al límite de perderla.
Esa noche de enero de 2013 es mojón para una historia que incluye tres asesinatos todos cometidos a modo de venganza por hechos anteriores, vinculados a enfrentamientos barriales en los que hay quienes dicen que siempre hay cuestiones relacionadas con la venta y el consumo de drogas.
Ramón Lezcano es el primer asesinado. Aquella noche del 29 de enero de 2013 había disparado con un arma de fuego, desde una moto, contra una mujer que estaba en Aulí y Manuel Iglesias. Eran las 21.30. Tres horas después, ingresó a la Guardia con una herida de bala en la zona abdominal y murió al otro día, por la mañana.
La policía detuvo a Agustín Luna, sindicado como el autor del disparo. En julio de 2014 fue condenado en juicio abreviado a nueve años de prisión. En 2020 recibió el beneficio de libertad condicional pero en octubre fue aprehendido con un arma, por lo que le revocaron el beneficio. Ahora, para el día de su cumpleaños, el 21 de enero, había vuelto a su casa, donde lo esperaba su pareja embarazada.
El mismo año del crimen de Lezcano a manos de Agustín Luna fue detenido Jonathan Luna, su hermano mayor, que en ese momento tenía 22 años por el asesinato de Javier Lovello, uno de los testigos que permitió la condena del menor de los Luna.
El 29 de junio de 2013, en Aulí al 1300, Javier Lovello, de 38 años, discutió primero con la madre de Agustín y Jonathan Luna, María Antonio Ponce, y luego con el mayor de los hermanos, que le descerrajó un disparo de arma de fuego que resultó fatal.
Aunque la versión de la familia Luna indicaba que Lovello abordó armado a Jonathan para reclamarle una deuda por drogas y que en ese marco el joven le sacó el arma y el disparo se produjo “por accidente”, los testimonios reunidos en la causa dan cuenta de que en medio de la discusión Luna lo trató de “buchón” y le dijo que se las iba “a pagar”. El disparo que mató a Lovello ingresó por la espalda.
Tras cuatro días prófugo, Jonathan Luna fue detenido en la terminal de San Nicolás. En mayo de 2014, en juicio abreviado, recibió una condena de 10 años y 8 meses. Aunque la Justicia intentó imputar como cómplice a la madre, quedó excluida de la causa.
María Antonia Ponce dijo a La Opinión este lunes, en la casa donde Germán “Popy” Sandoval mató a su hijo Agustín, que el crimen ocurrió “por venganza”, como un “ajuste de cuentas” porque su hijo mayor había matado a su tío.
“El tipo lo buscó y lo buscó. Lo amenazaba, dijo que me iba a pegar a mí donde más me duele. Las veces que lo he cruzado me quiso chocar con la camioneta”, contó y agregó: “Mi hijo le mató el tío, por eso él insistía en que se iba a vengar, hay mucha gente involucrada”.
Mientras la Justicia busca a Sandoval, esta historia implica a tres jóvenes asesinados, dos condenados, uno en condición de prófugo y el temor de varias familias que creen que, así como desde 2013 en adelante la respuesta ante cada hecho de violencia es otro aún más violento, puede haber más disparos de armas de fuego, es decir el riesgo de más muertes.
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión