Zoe empezó natación en Sadiv y la solidaridad la acompaña
La niña no vidente cuya madre comenzó una campaña para conseguir una máquina de escribir braille tuvo múltiples muestras de solidaridad. Ya tiene la máquina; una computadora equipada para personas de su condición; ropa, calzado y útiles para comenzar las clases, adquiridos con los recursos que las diversas iniciativas solidarias permitieron recaudar, como las pizzas que hizo Martín Burnes en La Ñata la semana pasada.
El Municipio comenzó la obra para conectarle agua y cloacas en la vivienda familiar, cuyo baño será refaccionado con los fondos reunidos y la mano de obra será donada por el padre de Diego Rodríguez, el sampedrino que reside en Miami y que compró la máquina de escribir que necesitaba Zoe.
La semana pasada, la niña comenzó clases de natación en Sadiv, cuya directora, Noemí Girard, se ocupó personalmente de recibirla, hacerle conocer las instalaciones y asesorar a la familia.