Viveristas estiman que los robos ya les hicieron perder más de $ 50 millones
Serán recibidos por el intendente para volver a plantearla la problemática. Una viverista aseguró que sospechan que hay un “mercado interno” alimentado por los delincuentes.
Los robos a viveros no cesan y el lunes hubo una nueva denuncia, en medio de la confirmación por parte del gobierno municipal de la reunión que mantendrá el intendente Cecilio Salazar con la Cámara de Viveristas local, que volverá a plantearle su preocupación por la problemática.
La reunión está prevista para este miércoles a las 15.00 y los productores llevarán su reclamo porque desde el encuentro que mantuvieron el año pasado con el jefe comunal y el secretario de Seguridad, Eduardo Roleri, las cosas no sólo no cambiaron sino que empeoraron.
La queja de los viveristas está relacionada con la necesidad de que además de la prevención de los delitos haya controles más exhaustivos, porque, como sostuvo el lunes Karina Kissling ante La Opinión tras denunciar un nuevo robo en su vivero, hay sospechas de que las plantas robadas alimentan el mercado interno, lo que significa ni más ni menos que serían revendores locales quienes adquieren el producto de los ilícitos.
“Desde la Cámara hemos pedido que Arba, AFIP, Municipio y SENASA comiencen a hacer controles serios en los puntos de venta”, señaló en diálogo con este medio el ingeniero agrónomo Pablo Ojea. El control sobre la venta ambulante, sobre todos los fines de semana, también es un reclamo de los viveristas.
La Cámara elevó una consulta a Senasa, cuya respuesta no fue satisfactoria porque la conclusión a la que arribaron es que el organismo “siempre controla a los habilitados y no al resto que no lo está”.
“No decimos todos, pero la mayoría de los puestos de la ruta ‘compran sin preguntar’ la procedencia y no hay operativos de control de material vegetal ‘en negro’, ese el problema”, sostienen desde la Cámara.
Senasa tiene registrados 172 operadores, entre productores y revendedores de plantas. Hasta agosto pasado, el organismo lleva 869 controles en ruta.
En la nota que el técnico de Senasa Walter Rolfo remitió a la Cámara de Viveristas el 19 de septiembre, el organismo asegura no haber recibido “pedido formal alguno por parte de las fuerzas de seguridad o de la Justicia para participar como organismo en algún caso de robo de plantas”.
La estimación que hacen respecto de las pérdidas que les acarrean los robos es sorprendente: hablan de alrededor de dos millones de plantas robadas. Se trata de un número que manejan los viveristas, que saben que muchos ya no denuncian, “cansados de que no pase nada”. “A todas esas plantas, ponele un valor promedio, tirándolo muy para abajo, de 30 pesos, ahí nomás son 60 millones de pesos”, calcularon.
El lunes, propietarios del vivero Dany, ubicado en la zona de La Buena Moza, denunciaron un nuevo robo en el establecimiento. Esta vez, los delincuentes se llevaron “5000 plantines de ornamentales”, según informó a La Opinión Karina Kissling y estimó que tienen un valor de alrededor de 100.000 pesos.