Usurpaciones: la historia de los 11 dueños del terreno de Cruz Roja y Dávila, que dicen que los “jodió hacer las cosas bien”
Son familias que adquirieron, de manera colectiva, el predio al dueño de la empresa donde trabajaban. Formaron una cooperativa que luego se disolvió e intentaron que el Concejo Deliberante apruebe una modificación de la San Pedro 2000 que les permitiera subdividir. Nunca se aprobó y ahora el terreno fue usurpado y parcelado por los ocupantes que aseguran que resistirán el desalojo. Entre sus argumentos, sostienen que un abogado les dijo que "no hay denuncia" y que "eso no tiene escritura". La Opinión accedió a la documentación.
De los seis terrenos usurpados la semana pasada, tres quedan ocupados. Uno de ellos está ubicado en Dávila y Cruz Roja y tiene una historia especial, la de 11 familias trabajadoras que soñaron con la vivienda propia y que ahora sufren las consecuencias de la usurpación.
Quienes tomaron ese terreno el jueves por la tarde están decididos a quedarse. A pesar de que conocen la historia de esas 11 familias que compraron el terreno, aseguran que resistirán el desalojo y, como en todas las otras tomas, piden por la presencia de autoridades "para negociar" y quedarse en el lugar.
Los dueños hicieron la denuncia ese mismo día. A las 15.15, cuando salieron de trabajar, pasaron, tomaron fotos y se reunieron. A las 16.00 estaban en la Comisaría. "Nos dijeron que una vez que llevemos todos los papeles, el juez da la orden de desalojo", contaron.
Los ocupantes irregulares dicen tener un abogado que los asesora y que les dijo que “no hay nada en San Nicolás ni en La Plata”, respecto de denuncias. Este caso fue denunciado en la Comisaría y para cuando Fiscalía solicitó las órdenes de desalojo esa denuncia no estaba en manos de Ramos, quien, aun así, la tuvo en cuenta en su solicitud.
Aunque estas familias contaron el esfuerzo que les significó comprar el terreno —"somos humildes trabajadores que se rompieron el lomo para comprar esto", contaron—, en la toma escucharon lo que quisieron de su testimonio y entendieron que “nunca terminaron de pagar, no tienen escritura”. Pero sí, tienen.
Fue suscripta en la escribanía Botta, bajo el número 236, el 26 de octubre de 2015. El vendedor fue Carlos Scazzariello, dueño de la empresa JS Textil, donde los compradores trabajaban. Él había adquirido el predio en 2011 a Ángel Gorbarán y Bety Fernández.
"Compramos los terrenos, los fuimos pagando y fuimos haciendo un sorteo entre los compañeros de trabajo que alquilaban y tenían hijos. En el listado empezamos siendo 20", contó en Sin Galera Viviana Corvalán, una de las dueñas y expresidenta de la cooperativa que habían conformado.
"Esto comenzó en el 2011, el dueño (de JS Textil, Carlos Andrés Scazzariello) compró una manzana y la ofreció a los empleados", contó Manuel, otro de los dueños. "Nuestro plan era subdividir para que cada uno tuviera su escritura y luego sí, empezar a construir, cada uno se arreglaría solo, porque era difícil juntar la plata, había algunos que querían vender y otros, hacerse la casa", agregó.
El asesor legal de la empresa, Nicolás Macchia, era concejal municipal y tenía llegada a Desarrollo Social y a Alicia Kirchner. Les recomendó que se conformaran en cooperativa. Hicieron los cursos en el INAES, contrataron a un gestor para llevar adelante la documentación y comenzaron a pagar 50 pesos como socios, "para recaudar para seguir pagando cosas del terreno, si teníamos que hacer documentos, etc.", relataron.
La cooperativa se disolvió por problemas internos. En el medio, se encontraron con la dificultad de que la manzana, a nombre de las 11 familias, no podía ser subdividad en esa cantidad de lotes, porque lo impide la ordenanza de uso y ocupación del suelo, la denominada San Pedro 2000.
"Scazzariello figuraba como dueño y después nosotros hicimos la escritura a nombre nuestro, que está a nombre de los 11, la pagamos y la hicimos en la escribanía Botta", relató Viviana y dejó copias de esa documentación en esta redacción.
"A nostros nos jodió hacer las cosas como corresponde, porque podíamos ir con unos ladrillos y unos palos, pero no: tenemos la mentalidad de hacer las cosas bien, queríamos cada uno ser dueño de nuestra parcela", señaló y se quejó de lo que sucedió en el Concejo Deliberante.
"Nos decían que era un curro de Scazzariello. Iván Paz decía que teníamos que presentar más cosas porque para él Scazzariello quería poner a los empleados de por medio para una excepción a la San Pedro 2000", sostuvo.
El expediente fue tratado en reuniones de comisión. En 2015, el debate llevó varios encuentros. La propuesta de modificación de la ordenanza San Pedro 2000 transformaba legalmente a esa zona en lo que ya es, residencial. Todavía no fue aprobado. En agosto de 2016 fue dictaminado en una comisión y pasó a otra, donde espera.