Una joven sola y en coma alcohólico a los 16 años
Fue el domingo a la madrugada. La trasladó la ambulancia del 107 desde un boliche bailable céntrico. La menor, oriunda de Capital Federal, ingresó al Hospital sola, según explicaron los médicos de guardia y por eso se realizó la denuncia policial. El domingo a las tres de la tarde, familiares de San Pedro la retiraron al recibir el alta médica.
Una situación más que preocupante se registró en la guardia médica del Hospital este fin de semana, cuando una menor de edad ingresó en estado de coma provocado por la ingesta de alcohol.
Los médicos que se encontraban trabajando en el área, confirmaron que el ingreso se había producido a las 5,20 horas de la madrugada del domingo luego de que la ambulancia del servicio de emergencias del 107, la retirara de un boliche bailable de la zona céntrica. Aunque no se pudo precisar quién realizó la llamada para solicitar el servicio, los profesionales indicaron que como la menor llegó sola se decidió realizar la denuncia policial y que recién el domingo a la tarde, alrededor de las 15 horas, concurrieron mayores de edad a retirarla porque ya se le había indicado el alta médica.
La chica, oriunda de Capital Federal, se encontraba inconsciente cuando la ambulancia la recogió y recién en la mañana comenzó a recobrar el sentido, por lo que los médicos pudieron averiguar que se encontraba pasando el fin de semana en casa de sampedrinos. La menor, contaba con un teléfono celular que sonó insistentemente durante la madrugada, pero los médicos no pudieron atenderlo porque se encontraba bloqueado y por eso, hasta que se recuperó, no pudieron dar aviso a los adultos responsables de la paciente.
Lamentablemente, el caso no es extraño para los médicos del Hospital que deben atender los fines de semana a muchos pacientes en notable estado de ebriedad, aunque no siempre se encuentran en coma alcohólico. Estos casos graves, en general, afectan a personas que no están acostumbradas a beber alcohol y que lo metabolizan con mayor dificultad. Pero lo que resulta más preocupante es que en general los menores son los más afectados y que no hay duda que consumen dentro de locales bailables que a pesar de la prohibición les permiten ingresar y les venden las bebidas.
Dos Preguntas
Más allá de los datos que arroja la cónica policial y el relato de los médicos, no trascendieron dos datos fundamentales que corroboran el escaso control de la normativa vigente. En primer término, cabe preguntar desde dónde fue trasladada la menor y en qué lugar tomó alcohol hasta quedar en coma. Resulta increíble que tras los rimbombantes controles post Cromagnon, sucedan casos como el citado.
Por último cabe destacar que los llamados al celular recién comenzaron en el amanecer del Domingo. ¿Nadie percibió que faltaba una chica de 16 años?