Un país para todos y entre todos
El pueblo argentino se debate hoy entre el “lock out” de los empresarios del campo, góndolas vacías y anuncios oficiales. Es que el gobierno nacional ha tomado una iniciativa concreta en materia de políticas redistributivas del ingreso, conforme a un modelo de país que tiende a compatibilizar crecimiento con equidad, es decir, a retribuir con mayores niveles de justicia el esfuerzo común de los argentinos, primero para salir de la crisis y luego para proyectar una economía sustentable. Son medidas de la más alta política económica, que precisamente por tal naturaleza, merecen un mayor y claro debate. Es momento pues, porque nunca es tarde para ello, de poner las razones y no la fuerza sobre la mesa. El hecho concreto que sacude al país no deja espacio para medias tintas. No cabe por estas horas la especulación política, ni el cálculo interesado y sectario. Debemos poner en discusión sincera los temas medulares de la argentina productiva de nuestros días. Pensemos por ejemplo qué será de la tierra con este esquema de “agronegocios”, vinculado fundamentalmente a un virtual monocultivo, que hace crecer la contaminación y en función del cual ya se han desforestado 1.100.000 hectáreas. Preguntémonos cómo se explica que en este granero que es la Argentina con capacidad para alimentar a 300 millones de personas, haya un tercio de la población pobre e indigente; o cómo seguir sosteniendo un modelo productivo donde el 20% de los productores de soja producen el 80% de estos granos y apenas el 2,2% de ellos están en condiciones de producir el 46%, ¿qué les queda al 80% restante, que prácticamente trabajan con sus manos el campo? Ni el gobierno, ni los representantes del campo, pero tampoco la sociedad que asiste impotente a este escenario, podemos perder un solo minuto en asumir este debate de fondo, ante lo cual todo lo demás se torna anecdótico, sirviendo sólo de caldo de cultivo al nunca ingenuo camino de la violencia. En suma, nuestro espacio político respalda el modelo de país y la orientación de las medidas anunciadas por nuestra presidenta, aspirando a generar el debate social necesario para la gestación definitiva de un país para todos y entre todos. Porque sólo si diseñamos un modelo productivo, competitivo, rentable, pero con participación equitativa en sus beneficios, viviremos en una Argentina viable, organizada y justa. Agrupación, “todos por San Pedro”. Frente para la Victoria.