Tras retar al gabinete, Salazar decidió aumentar el poder a Ramón y puso un “interventor” en Desarrollo Humano
El intendente encabezó una reunión de gabinete ampliado el sábado, en la que recriminó a sus funcionarios por algunas cosas que no salieron bien y otras que están demoradas. Alfredo Camilletti y Karina Chiarella fueron los principales blancos de las quejas. En la interna contra Silvio Corti, concejales oficialistas hicieron público su deseo de que Ramón Salazar asuma como Secretario de Coordinación, algo que el Jefe Comunal avala. Fernando Negrete manda en Desarrollo Humano. Barbieri no estuvo en el encuentro, pero antes charló con Salazar.
El Gobierno de Cecilio Salazar tiene un marzo con muchos frentes abiertos, camino a un año en que deberá refrendar en las urnas la confianza masiva que le dio la comunidad en 2015.
Paritarias municipales, contrato con Ashira, aumento de boleto de colectivo, cinco meses para las elecciones Primarias, internas palaciegas que esmerilan la tarea cotidiana de la gestión, obras que anunció el año pasado y no concretó, otras que están previstas para un 2017 del que ya pasó un tercio, y una alianza política con varios sectores que debe sostener para garantizarle a Cambiemos un caudal de votos que ayude a la problemática que afrontan Macri y Vidal en su disputa por “el relato” con el kirchnerismo, forman parte del asunto.
Cecilio Conducción
Por todo ello, la reunión de gabinete ampliado del sábado en la Casona 1830, donde Salazar tiene su bunker hasta que la responsable que eligió para que le mejore el despacho termine su tarea, fue el escenario para que el Jefe Comunal intente poner en caja a sus funcionarios y al oficialismo en el Concejo Deliberante, camino a lo que se viene.
El resultado del encuentro, en el que hubo tonos elevados de voz, dedos levantados, recriminaciones y retos varios, fue la ratificación de que el intendente también desea que su hijo sea su “jefe de gabinete”, asumiendo el cargo de Secretario de Coordinación, y la decisión de que Karina Chiarella siga como Secretaria de Desarrollo Humano pero ya sin decisiones de conductora, tarea que quedó a cargo desde el lunes de Fernando Negrete, el Director de Comisiones de Fomento, presidente de la Juventud Fe, líder territorial del Gobierno en los barrios y ahora Subsecretario de Desarrollo Humano con poder sobre “la caja” más preciada.
En la reunión del sábado estaban todos los funcionarios, los concejales oficialistas y los referentes de Cambiemos. Menos los del ARI, que se aventuraron a marcar una cancha que no miran ni desde la tribuna y quedaron expuestos en su escasísima convocatoria, y el presidente del Concejo Deliberante Mario Barbieri, con quien Salazar charló después del encuentro en Independencia por el acto del Día Internacional de la Mujer.
Un encuentro “áspero”
Aunque el propio intendente recomendó al finalizar que no se le contara a la prensa los pormenores del encuentro, La Opinión logró reconstruirlo con diversas fuentes que estuvieron presentes, en estricto off the record. Es que como dijeron algunos, “esto es digno de ser contado”.
“Fue bastante áspero el tema”, coincidieron hombres y mujeres de los distintos espacios que alimentan la alianza Cambiemos en San Pedro y que estuvieron en la Casona.
Salazar comenzó la reunión pidiendo resultados de algunos temas que vienen retrasados. Casi a los gritos, preguntó: “¿Quién es el encargado?” de tal o cual cosa. Alfredo Camilletti y Karina Chiarella fueron los principales blancos de su bronca.
Es que las obras del año pasado no se hicieron y las de 2017 no comenzaron. La publicación de La Opinión de la semana pasada respecto al proyecto para el barrio Obrero fue uno de los temas. Camilletti sólo atinó a decir que estaban por llegar los materiales y el intendente le recriminó que no se ocupe personalmente de exigirle a Coopser que ponga manos a la obra.
Peor fue cuando le preguntó a Chiarella, cuya área no hizo relevamiento alguno y en el “diagnóstico de situación” escribieron generalidades vacías de contenido. La respuesta fue que una vecina le había “comentado” que “pasaron preguntando algunos datos”. La sorpresa fue mayúscula. Salazar levantó la voz para decirle que no quiere a las trabajadoras sociales detrás del escritorio. “Fue humillante”, contó un participante del encuentro. “Está blindada, a mí me dice algo así, le grito de todo y me voy”, dijo una mujer que estuvo allí y que recordó el affaire Prez, que se fue del Ejecutivo no sin denunciar al intendente por maltrato de género y malversación de fondos públicos.
Salazar recriminó a sus funcionarios que hablen en primera persona cuando son entrevistados en los medios. “Yo, yo, yo; acá todos dicen ‘conseguí esto, conseguí aquello’”, se quejó. Además de lo habitual –a Sánchez Negrete le gusta hablar así y se lo marcaron varias veces, al punto de que empezó a ser cuidadoso al respecto–, algo pasó durante el temporal, cuando Desarrollo Social envió un camión con elementos para los damnificados: hubo varios que se adjudicaron la gestión que hizo el propio intendente vía telefónica con el jefe de gabinete del ministerio.
Cecilio les advirtió que octubre será crucial, lo que da cuentas de que al menos hasta las elecciones no habría expulsiones. Les pidió hacer “una gran elección” y les recordó que el resultado depende de ellos, que serán “los fusibles”.
“El único contento es Sánchez Negrete, porque tiene la caja llena, pero eso es así porque la plata que hay es de las obras que no se hacen”, les dijo el intendente. Camilletti carraspeó. Cerca suyo, su mentor, Silvio Corti, también.
FERNANDO NEGRETE, "EL INTERVENTOR"
El presidente de la Juventud Fe ascendió a Subsecretario de Desarrollo Humano. Aseguran que Chiarella “quedó para firmar papeles” y que la movida es parte de la “estrategia electoral” de Salazar.
Antes de que termine la reunión de gabinete ampliado, el intendente expuso a Karina Chiarella a una situación que para los presentes explicó la designación de Fernando Negrete como subsecretario de Desarrollo Humano, algo que todos entienden como una especie de “intervención” del área.
Salazar le recriminó a la socialista que si le pidiera una lista de referentes de los barrios que puedan decirle cuáles son los problemas de cada territorio, no podría entregarla. Ella sólo atinó a decir que para eso estaban las comisiones de fomento.
Su respuesta fue premonitoria: el Director de Comisiones de Fomento es ahora el que manda en el área, aunque ella siga al frente. Con el dedo levantado, el Jefe Comunal le dijo a Chiarella que el día del temporal la había llamado sin obtener respuestas.
En la mesa chica, que a veces es muy, demasiado chica, el mandatario municipal dijo más de una vez que no es su intención expulsar a Karina Chiarella. Incluso la defendió públicamente en más de una vez en las que sus cercanos le señalaron múltiples errores y maneras distintas de trabajar a lo que acostumbran sobre todo los hombres de Fe, peronistas al fin.
Fernando Negrete, acotado a Comisiones de Fomento, tenía desde antes un capital político con el que Chiarella no puede competir. El mismo por el que José Franchini la mira con sorna: lo conocen en todos los barrios, andan en la calle a toda hora desde hace mucho tiempo, trabajan en el territorio con mirada política.
“Lo de Karina es un tema, quedó para firmar papeles”, dijeron cerca del despacho oficial. “Fernando ahora tiene que conducir un monstruo con cien tipos con mañas, no se come de un bocado esa área. Para el laburo en la calle, él es el mejor, pero conducir un equipo de gente complicada no es nada fácil, Karina no lo hizo bien”, reconoció un compañero de gabinete de la trabajadora social que no suele hablar mal de ella, como hacen muchos otros.
La respuesta a la “intervención” de Desarrollo Humano con un hombre del riñón de Fe hay que buscarla en las elecciones. En el Gobierno están convencidos de que la disputa electoral va a estar en los barrios. Su evaluación es que “al centro” –léase: la clase media influyente y la de trabajadores formales que sufren complicaciones pero comen, se visten y salen cuando pueden– entran por diversas puertas: Macri y Vidal, Rosa y Barbieri, el Pro y la UCR, algunas decisiones que fueron bien vistas y gestiones valoradas por esa porción del electorado.
Los funcionarios que aceitan la maquinaria electoral consideran que “en los barrios” Salazar generó mucha expectativa con la que todavía no pudo cumplir del todo. “Las necesidades son muchas y no llegamos a todas como quisiéramos”, reconoció uno de los secretarios del gabinete.
“Darle todo a Fernando tiene que ver con esa estrategia, que es la misma que haber destinado la mayoría de las obras para este año a los barrios; y con Karina eso no se puede hacer, necesitamos intensidad de laburo”, aclaró otro que acompaña a Salazar en la toma de decisiones.
EL PEDIDO POR "RAMÓN COORDINADOR" TIENE ABANDERADOS
Concejales del oficialismo hicieron público lo que piensan hace meses: que el hijo del Jefe Comunal debe ser Secretario de Coordinación. La interna con Silvio Corti y el futuro del gabinete.
“Es la mano derecha de Cecilio, ya es el coordinador”, le dijeron a La Opinión varias fuentes del Gobierno en noviembre, cuando este semanario anticipó que Ramón Salazar, el hijo abogado del intendente y Secretario de Legal y Técnica había sido ungido por su padre en virtual “jefe de gabinete”.
En ese momento, la rosca interna desatada por quienes veían a Silvio Corti como un “mimado” del intendente estaba en llamas. Nunca cesó y esta semana fue reavivada luego de una “reunión con concejales” de la que no participaron todos, que duró alrededor de cuatro horas, y en la que el Jefe Comunal concluyó que hay un “consenso generalizado” para que su hijo sea designado Secretario de Coordinación. En los hechos, dicen, es ponerle firma a un decreto para que pueda ejercer con todo el poder que ya le fue otorgado.
“Se vienen las elecciones, Cecilio necesita alguien de total confianza. Él tiene un estilo de conducción bien peronista, personalista, vertical. Quiere estar en todo y a veces no puede, son muchas cosas y el día es muy largo. ¿En quién más va a delegar? Es su hijo, es él mismo. Así lo ve”, describió a La Opinión alguien que conoce al intendente desde sus primeros pasos en el sindicalismo.
En la reunión de gabinete ampliado Silvio Corti también hizo uso de la palabra. Para graficar el enojo del intendente por algunos resultados que no son satisfactorios utilizó una parábola poco feliz, que hizo fruncir el ceño a varios. Dijo que esperaba que “el jefe” tuviera que introducir cada vez menos una de sus falanges en aquello que también denomina a la parte más plana de la taba.
Algunos se rieron de la figura. Otros se guardaron para sí un comentario que luego hicieron con allegados acerca de que el del “dedo en el c…” era el propio Corti. Luego utilizaron lo que en el propio gabinete llaman “el brazo mediático” para lanzar la bomba. Fueron los concejales Gerardo Pelletier y Juan Garavaglia –a la sazón, primero en la línea sucesoria del intendente– los que hablaron en San Pedro Informa de “una decisión unánime” del bloque Cambiemos para que Ramón coordine el gabinete.
Los ediles no expusieron la interna desatada en relación al tema. Cerca de Silvio Corti se sorprendieron. No porque lo hayan atacado de esa manera, algo que este semanario reveló hace ya muchos meses, sino porque esta vez el planteo fue público, con nombre y apellido.
“Esto viene muy trabajado, muy conversado, no sé si va a aguantar, es muy fuerte este embate”, analizó uno de los pocos que conversa a diario de todos los temas con el Secretario de Gobierno.
La misma fuente cree que hay un trasfondo político relacionado con la campaña, por más que Corti haya dicho en reiteradas oportunidades “yo no quiero ser candidato”.
La disputa, entonces, es por acumulación de poder en el gabinete, en relación a la toma de decisiones. Salazar no dice mucho sobre el tema. Aunque algunas de sus actitudes hablan por él. “Cecilio es muy resbaloso. Un día te levanta a vos, otro día levanta a otro, genera una competencia que hace que todos laburen, aunque a veces eso no le hace bien a los equipos”, reflexionó un hombre que compartió varias campañas políticas con él.
A Corti le achacan ser poco resolutivo, no tener buena relación con muchos sectores, ladrarles a los aliados, intentar generar consensos a fuerza de puño cerrado. Algunos le reconocen ser uno de los pocos que no habla mal de sus compañeros de gabinete, un ejercicio que practican varios.
La designación la semana pasada del Director de Producción Germán Font, un joven de Marcos Juárez, Córdoba, estudiante avanzado de Agronomía, a quien Corti y Camilletti conocen de Federación Agraria, generó resquemores.
“Es productor, joven, sabe gestionar y está acostumbrado a disputar con los funcionarios. No tiene por qué saber sobre el cultivo del durazno, lo que tiene que saber es cómo garantizar políticas públicas para que a los productores les vaya bien”, habría dicho Silvio Corti en una conversación sobre el nuevo funcionario.
“Si falta coordinación, cómo lo van a nombrar a Ramón, que ya era el coordinador”, dijo en su mesa de café un ávido lector de las roscas palaciegas. Corti siempre dijo que con Ramón Salazar y con Mario Sánchez Negrete “laburamos bárbaro”. Con el café frío, el conocedor de las roscas dijo una verdad de Perogrullo: “Nadie va a ser tan boludo de pelearse con el hijo del intendente”.
En el Palacio aseguran que Corti intentó hablar con Salazar, pero que no le “pasó cabida”. La versión indica que Corti cree que el Gobierno arriesga mucho sin ganar nada con la jugada mediática de volver a instalar a Ramón como coordinador. También indica que la mirada del intendente es la contraria.
Punto en contra para el Secretario de Gobierno, entonces, en cuyo entorno creen que hay quienes trabajan para “sacarlo de la cancha”. Por lo pronto, nadie apuesta por su renuncia. Aunque alguien lo escuchó decir que en su casa en el campo hay un fresno que está hermoso para tomar mates bajo su sombra.