Tras el incendio del quincho, reunión clave en el Náutico
La Comisión Directiva convocó a una “reunión abierta” para debatir acciones que permitan “mejorar la convivencia”, luego del siniestro que destruyó uno de los quinchos del sector denominado “Punta Pavita”. Los tres socios sospechados de haber comenzado el fuego siguen suspendidos, aunque negaron su responsabilidad en el hecho.
El incendio de un quincho en el sector denominado “Punta Pavita” del club Náutico devolvió a la institución celeste uno de los debates más importantes que han surgido en el marco de la gestión actual del Comodoro (máxima autoridad) Marcos Arana: la relación jóvenes/adultos respecto al uso de los espacios que pertenecen a los alrededor de 9 mil socios que posee.
Con las llamadas “previas” suspendidas tras una pelea a golpes de puño entre dos jóvenes un sábado a la noche, la discusión sobre cuáles son los comportamientos adecuados para una buena convivencia entre generaciones, intereses, gustos, preferencias y formas de llevar adelante la cotidianeidad en el club volvió con fuerza.
El sábado a las 17.00 habrá una “reunión abierta” para socios activos y vitalicios, convocada por las autoridades para “debatir y analizar temas relacionados con la situación general de la institución”.
La convocatoria señala que será “el ámbito propicio para expresar inquietudes y propuestas relacionadas a aquellos comportamientos que ameritan nuevas acciones preventivas para mejorar la convivencia en todos los espacios y grupos etarios” que forman parte de la vida institucional.
La reunión tendrá sus bemoles, habida cuenta de que las posiciones respecto al uso del club por parte de los jóvenes es materia de debate entre los adultos, que en su momento aceptaron a regañadientes que era mejor que disfrutaran del encuentro entre amigos y alcohol en los límites de la institución en lugar de “no saber a dónde están”.
Los jóvenes tienen una presencia mayor en la vida cotidiana del club, por lo que si acaso hubiera que votar, su presencia masiva en la reunión les podría garantizar un “triunfo”, por llamarlo de alguna manera, en lo que será materia de disputa discursiva durante la reunión del sábado.
Del lado de los adultos, la preocupación está puesta no sólo en las conductas de ciertos grupos –que, por cierto, atentan contra su propia salud–, sino también, y ya podríamos decir sobre todo, en lo que respecta a su propia condición de socios “expulsados” de los espacios que alguna vez sintieron propios.
Al respecto, es ilustrativa la opinión de Benito Aldazabal que se reproduce en esta página, cuya frase “el club Náutico no se ha fundado para que funcione como un boliche bailable” da cuentas de lo que está en discusión.
El Comodoro Marcos Arana tiene ante sí un desafío importante. Con apoyo por parte de la juventud pero también con la certeza de que lo que se discuten son –una vez más y no sólo por “el club” sino por la sociedad toda– los límites de lo posible y la colisión de derechos, le toca ser piloto de tormenta en una situación que tiene diversas aristas que trascienden la mera cotidianeidad de la institución.