Tras accidente fatal en Ruta 1001, evalúan la actuación del Jefe de Guardia
Una moto en la que se trasladaban dos mujeres sin casco chocó con un auto que circulaba en la misma dirección, rumbo a Río Tala. Una de las ocupantes murió en el Hospital y la otra sufrió la perforación de un pulmón. Los familiares de la víctima fatal evaluaban denunciar a Gustavo Alarcón, a quien acusan de no enviar otra ambulancia al lugar del accidente. Pichioni pidió informes para analizar lo sucedido.
Este martes alrededor de las 15.00, una motocicleta de 110 CC y un Fiat Palio protagonizaron un accidente producto del que murió una mujer de 47 años, identificada como Claudia Albide, y suscitó una polémica con el Jefe del Servicio de Emergencias Gustavo Alarcón y la solicitud de informes por parte del Director del Hospital Pablo Pichioni para evaluar las responsabilidades.
Albide -tía de Nicolás Castillo, que viajaba a Río Tala para ayudar en su búsqueda- circulaba como acompañante en la moto que conducía su hermana Graciela camino a Río Tala por la Ruta 1001, las dos sin casco. Cuando intentaron esquivar un montículo de material rap con el que fue tapado uno de los tantos baches de ese camino provincial, perdieron el control y fueron embestidas por un automóvil.
Ambas quedaron tendidas en el pavimento. La reconstrucción que hizo La Opinión indica que el Destacamento Policial de Río Tala recibió un llamado que alertó sobre el accidente, tal vez el mismo que avisó a esta redacción; la policía informó al Centro de Salud.
La médica de la ambulancia de Rio Tala llegó al Hospital con Claudia Albide, quien según informó el Jefe del Servicio de Emergencias Gustavo Alarcón presentaba fractura de base de cráneo severa. A las pocas horas, la mujer falleció.
Por su parte, su hermana Graciela fue trasladada por la misma ambulancia, que la fue a buscar luego de dejar a Claudia en el nosocomio. Al principio parecía tener lesiones leves, con apenas algunos cortes en el cuero cabelludo, pero luego detectaron que tenía un pulmón perforado producto de la rotura de una costilla, por lo que al cierre de esta edición evaluaban trasladarla a un centro asistencial de mayor complejidad.
La familia de las hermanas Albide acusó a Alarcón de haberse negado a permitir que una ambulancia del Hospital fuera a buscar a la segunda de las víctimas mientras la otra llegaba allí en la Unidad de Traslado de Río Tala, versión respaldada por quienes se encontraban en la Guardia al momento de la decisión.
Tras lo sucedido Alarcón puso a disposición su renuncia ante el Director del Hospital Pablo Pichioni, quien pidió informes al Destacamento policial de Río Tala, desde donde avisaron al Centro de Salud de la localidad; a la enfermera que allí recibió la novedad del accidente; a la médica de la ambulancia de ese centro de salud; y al propio Jefe de Guardia, quien sostuvo que se enteró del accidente por el llamado telefónico que le hizo un periodista de este medio, llamado que tuvo lugar a las 15.16 de ayer martes.
Los familiares de las víctimas, junto a la abogada Mirta Cardoso, evaluaban la posibilidad de radicar una denuncia penal ante lo sucedido. Para ello, aguardaban la evolución de Graciela Albide para que pueda contar cómo ocurrieron los hechos desde el momento posterior al accidente.