Por despidos, medida de fuerza en Coplac
Un grupo de trabajadores permanece frente a las puertas de la planta ubicada sobre Crucero General Belgrano. Reclaman el cumplimiento del convenio laboral, mejores condiciones de seguridad e higiene y la reincorporación de dos trabajadores despedidos durante las últimas semanas. Representantes de la empresa llegaron hasta el lugar y mantienen una asamblea con delegados y trabajadores para intentar destrabar el conflicto.
La medida de fuerza inició esta tarde, luego de una audiencia que no prosperó entre los propietarios de Coplac y los delegados del Sidicato de Textiles (Setia), que nuclea a los empleados de la planta.
Los motivos centrales del reclamo rondan en la reincorporación de dos trabajadores despedidos, el cumplimiento del convenio laboral y mejoras en seguridad e higiene.
“Los chicos no tienen ropa de trabajo adecuada, no tienen máscaras con filtro ni mamelucos”, contó Flavio Corvalán, delegado de Setia dentro de la planta de Coplac, en diálogo con La Opinión y explicó: “En los últimos dos años venimos pidiendo la recategorización de los trabajadores y en cambio, la empresa trabaja con una tercerizada”.
Corvalán se refirió a los despidos que se dieron en la planta en las últimas semanas y expresó: “Nos dicen que despiden empleados por disminución de demanda, peros nos sacan a los de Setia y no al personal de la empresa tercerizadora”. Por esto es que sostienen que se trata de “una persecución laboral a los trabajadores de planta”
Corvalán aseguró que la polémica empresa Catanzaro Group “apareció en octubre o noviembre de 2012, cuando junto a los compañeros se logró un aumento y se calmaron las aguas, pero después de ese conflicto, entró a jugar la empresa y con esos chicos presionan, porque no tienen nadie que los represente y cobran la mitad del salario que cobramos nosotros”.
El delegado de Setia dentro de la planta comparó: “Un empleado de Catanzaro que hace lo mismo que nosotros, gana 4.500 pesos, mientras que bajo el convenio de Setia estamos en 7.500 pesos, hay una diferencia muy grande y los chicos se dieron cuenta”.
Esta tarde, en medio de los reclamos, representantes de la empresa se acercaron a negociar, y Corvalán explicó al respecto: “La empresa quería arreglar 5 puestos de trabajo, de 120; sólo recategorizar a cinco de los chicos y al resto no”, y agregó: “Acá no se trata de convencimiento, sino de violar las leyes de trabajo y los derechos de los trabajadores, porque a igual actividad, igual remuneración”.