Todos juntos
El 16 de Diciembre se llevó a cabo el acto de clausura del ciclo 2005 en el Instituto “Margarita O‘Farrell de Maguire”.
A la emotividad que siempre ha caracterizado estos actos, se sumó este año la reflexión sobre el siniestro provocado en junio, que terminó totalmente con la biblioteca, el laboratorio, el archivo y dañó en menor escala el resto del establecimiento.
Extractamos del discurso del Director, Agrónomo Abel Zabala:
“La vida -manantial inextinguible de alternativas cambiantes- coloca al hombre ante situaciones que lo llevan a la plenitud de la dicha, de la realización personal, del logro de metas o, por el contrario, lo pone ante trances que exigen afloren su más íntimas reservas…”
“…El año 2005 se presentó con los mejores auspicios para este Instituto… un proyecto del docente Agrónomo Germán Barceló –sobre siembra directa- fue premiado por la Fundación Monsanto en EEUU, con el primer premio entre 13 proyectos de Argentina y otros países; 60.613 dólares llegaron al Instituto con un fin específico: la compra de un tractor y una sembradora y el desarrollo del proyecto que contempla la explotación agrícola…”
“… Al comenzar el año lectivo, refacciones, mejoras y pintado de todo el edificio escolar, donación de los materiales para alambrar el Campo Experimental San Patricio, la terminación de la sala de industrias…” “…se sumaban para hacernos presumir un año pródigo en adelantos…”
“…Pero, el 19 de Junio toda esta perspectiva optimista se derrumbó. El fuego evaporó treinta años invertidos en biblioteca, laboratorio y archivo, con muebles, equipamiento, libros, computadoras…”
“…La Prioridad pasó a ser, la reconstrucción; resintiendo notablemente la actividad académica y postergando proyectos de ampliaciones y mejoras…”
“…La adversidad puso a prueba la capacidad de respuesta de la comunidad educativa (en su conjunto y en lo individual), el espíritu solidario de la población y el grado de sensibilidad de las autoridades gubernamentales de las distintas esferas. Esta puesta a prueba puso en evidencia la existencia de un compromiso declamado y de otro compromiso silencioso pero efectivo…”
“…La dura etapa que nos tocó vivir, considero que nos ha fortalecido y nos ha unido en torno a un objetivo prioritario: reconstruir la escuela no solo material sino espiritualmente…” “…la herida va cerrando lentamente…”
en un momento de este acto, al que tradicionalmente concurre gran parte de la comunidad de Santa Lucía y al que cada año llegan ex alumnos de diversas promociones (esta vez había muchos), el Agrónomo Pablo Recuero expresó:
“Por nuestra naturaleza humana, somos de hábitos gregarios, nos movemos en grupo. Cuando evolucionamos desde las sociedades ágrafas, comenzamos a congregarnos en comunidades. Esta nueva forma analógica de comunidades posibilitó que recibiéramos del pasado un amplio conocimiento de lo que somos. Una recopilación de siglos nos enseña que somos seres de encuentros, vivimos como personas, nos desarrollamos y perfeccionamos creando diversos tipos de encuentros alrededor del lenguaje escrito: encuentro con las demás personas, las instituciones, el paisaje, las obras culturales, el Ser Supremo…”
“En la madrugada del 19 de Junio perdimos el punto de encuentro, un voraz incendio nos involuciona culturalmente, hemos perdido nuestro reservorio escrito de cultura y conocimiento. Cunde la desesperación. Todos: docentes, alumnos, vecinos, comunidad, se conmueven por este hecho reaccionando de las más diversas formas…”
“… pero algo pasó: la comunidad puso luz en este momento oscuro… tomando la frase de San Francisco de Asís: Después de cada caída se empieza otra vez desde un punto más alto. Comienza haciendo lo que es necesario, después lo que es posible y de repente estarás haciendo lo imposible…” “… Nos convoca una actitud de aprovechar la oportunidad. Este hecho tiene una enorme incidencia en la reconstrucción de un nuevo sentido para la escuela y estamos convencidos que la respuesta es trabajar aún más duro para ofrecer más y mejor educación…”
“…El 7 de Diciembre reinauguramos la biblioteca, fruto del esfuerzo colectivo. Reinauguramos el punto de encuentro, de la cultura y el conocimiento…”
“… Por estos días, en que dentro del clima de las fiestas se reavivan ilusiones y esperanzas, nos disponemos a recrear las nuestras. Y lo hacemos contra toda evidencia. Porque tenemos claro que no es necesario que las cosas resulten como es debido para seguir creyendo en la misión de educar…”
Siendo imposible agradecer en forma personal a tantas personas que colaboraron, corriendo el riesgo de olvidar injustamente el nombre de alguno, a continuación se descubrió una placa recordatoria que dice: el Instituto Margarita O´Farrell de Maguire a quienes apoyaron la reconstrucción de lo perdido en el incendio del 19/06/05.
La comunidad educativa del Instituto quiere, al fin de esta nota expresar sus deseos de luz, esperanza y paz en todos los corazones.