Motivados por las consecuencias de la creciente que anegó tanto predios públicos como privados, la Comisión Directiva que Preside Peto Ramognino cedió al municipio sus dos canchas de rugby para que invite a la población a utilizarlas durante el fin de semana.
“La idea es abrir las tranqueras los días que no tenemos partidos”, contó a este semanario Ramognino por lo que el único día que la cancha no podrá ser utilizada por el público será el 5 de marzo, día en que Los Biguá jueguen de local por el torneo de la URBA.
De mantenerse la inundación, los dirigentes del Tiro no descartan en permitirle al municipio que utilice también la cantina para recaudar dinero y entregarlo al Hospital.
Cabe recordar que desde el 2010 el predio está dividido en tres, o debería. Por un lado: Los Biguá que utilizan dos canchas, un quincho y un juego de baños; en el medio Roberto Calvet que con concesión vencida sigue usufructuando el camping al que todos los fines de semana llegan decenas de familias, y del otro lado el Castillo en el que debería funcionar el museo Malvinas, de los excombatientes.