Sobre pobres e indios
Hace solo 102 años, en 1904, se produjo un hecho trascendente en la historia política Argentina, fue elegido por el Barrio de la Boca, en Capital Federal el primer diputado del partido Socialista: Alfredo PALACIOS. Algún diario de la época hizo constar en el título “por fin la boca tiene dientes”. Abogado laborista, en su estudio jurídico existía una chapa que rezaba: “ se atiende gratis a los pobres”. En su tesis doctoral titulada “la miseria de la República Argentina”(tema tan actual como hace 102 años!!) denunciaba: “...nuestros gobiernos tienen por norma de conducta el despilfarro y las defraudaciones y los latrocinios se cometen a diario y quedan impune...”. Ah, con la impunidad, ya en ese entonces era lo habitual, es que en el régimen de Julio Argentino Roca, (el principal exponente de la patria liberal, que dominaba la Nación), la Justicia estaba dominada desde los despachos públicos y no existía un solo Juez que no respondiera a los dictados del gobierno oficial. No es raro pensar que en el gobierno del Carlos Saúl I también se atenazara a la Justicia, conforme la famosa servilleta que Carlos CORACH le escribiera al asesino económico del país, Domingo Felipe CAVALLO alguna vez que éste se mostraría preocupado por la suerte de sus actos de gobierno. Es que el peor peronismo, aquel que gobierna según prácticas del Liberalismo (y también con sus ideas), utilizó los mismos vicios y prácticas del régimen conservador, y entre esos vicios cuenta el de manejar a su antojo a la justicia, para que, después de la catástrofe que ocasionan salir impune, sin castigo ni sanción ninguna. Aún permanecen en esta cómoda situación, alguien puede explicar por que??. Menos mal que el pueblo tiene memoria y la malversación de los bienes públicos(y de la moral del Pueblo Argentíno), tal cual lo hizo el deleznable riojano que hoy ocupa penosamente una banca en el Senado, es repudiada por todos los que tienen consciencia de esos robos, por ello cuando inocentemente Valeria Linch presentó a la CECILIA BOLOCCO en el teatro donde hace su obra “Víctor Victoria” la Chilena fue silbada en forma permanente y pertinaz, hasta que prácticamente se escondió en el camarín de la artista. También el sistema liberal que imperó en la década del 90 utilizó una práctica muy común en su gobierno repartir bienes y emprendimientos para que, los ricos considerados por su accionar, los amparen después que desaparezca del poder. Del mismo modo que Julio A. ROCA les entregaba miles y miles hectáreas a los MARTINEZ DE HOZ, UNZUÉ y otros hoy estancieros y ganaderos que defienden su “política de carnes” y la legitimidad de esa usurpación de tierras que era, originalmente, de los naturales, nuestros paisanos los indios, según los llamaba SAN MARTIN. Años después, millones de esos “naturales” o “paisanos”, morochos, cejijuntos, pelos chuzos, habitan el Gran Buenos Aires y viven extremadamente mal, dependiendo de la buena voluntad del gobierno de turno. Entre las épocas, ni PALACIOS, ni PERÓN, ni IRIGOYEN ni algunos que defendió el derecho de los pobres e inmigrantes, pudo hasta ahora superar esa postración. por el Dr. Elvio Macchia