Sin rastros de la banda de encapuchados
La semana pasada se produjo un nuevo hecho que se suma a los tres anteriores. Hubo allanamientos positivos pero pocas novedades.
No cesan las andanzas de una probable banda que en las últimas semanas habría protagonizado graves episodios delictivos. La investigación no asegura que se trate de los mismos sujetos, pero por la modalidad utilizada en cada uno de los hechos se presume que podría tratarse de los mismos delincuentes.
La semana pasada se produjo el cuarto hecho de robo calificado y privación ilegítima de la libertad. Coincidiendo con los perpetrados desde hace cuatro semanas a la fecha, en perjuicio de una familia de origen chino, otro al matrimonio Barboza en Santa Lucía y el registrado al empresario Roberto Fortunato.
En esta oportunidad el hecho se produjo en un establecimiento rural ubicado sobre el kilómetro 25 de la Ruta 191. Allí reside la familia Gordó, quien debió soportar por un largo período toda clase de violencia y amenazas que podrían haber terminado de la peor manera.
A primeras horas de la tarde del jueves pasado, tres sujetos encapuchados sorprendieron a los integrantes de la familia que se hallaban en el lugar. Empuñando armas de fuego, los delincuentes redujeron en primer término a Daniel Gordó de 39 años, a quien lo introdujeron sobre el interior de la vivienda en donde se encontraba el resto de la familia. Allí también se redujo al padre de Daniel, a su esposa, Zunilda Domeniconi y a un joven sobrino de estas personas. Revolvieron toda la casa y maniataron a toda la familia para darse a la fuga de inmediato. En ese instante se produjo una situación impensada ya que sin ningún tipo de necesidad, uno de los delincuentes disparó hiriendo levemente a Daniel Gordó en la cabeza, pues la bala llegó a rozarlo. De todos modos, según los datos recogidos, fuentes policiales aseguraron que ese disparo se habría producido accidentalmente.
Los delincuentes huyeron de a pie, pero se estima que alguien los estaría aguardando en cercanías del lugar. Tras el asalto se llevaron unos 700 pesos en efectivo, un celular y otros elementos de menor valor que había en la vivienda.
Allanamientos y detención
Desde la Policía y Fiscalía comenzaron a recabar información para dar con los autores de este hecho y los demás registrados en diferentes puntos del partido. Pues estos sujetos podrían estar involucrados en otros episodios y no sólo en los cuatro robos destacados.
Fue así como se dictaron ocho órdenes de allanamiento que se llevaron a cabo entre la madrugada y mañana del día viernes. Cinco operativos se desarrollaron en viviendas del Barrio 2 de Abril, sobre la calle 21 bis entre Quiroga y Liniers; otros dos, en dos viviendas del barrio San Miguel, puntualmente en calle Casella, entre Benefactora Sampedrina y Fray Luis Del Pozo; y el restante se registró en San Lorenzo al 2900.
Como resultado de estos operativos se secuestraron 15 ravioles de cocaína, una escopeta tumbera, un par de zapatillas, una moto Gilera 110 y una billetera de cuero marrón.
Además se trasladaron a cuatro personas, un mayor y tres menores, que podrían haber tenido participación en algunos de los hechos.
Finalmente, a las pocas horas y debido al relato y reconocimiento de una de las víctimas, se determinó la detención de Enrique Ferreira, quien junto a otros jóvenes robaron y golpearon a un hombre el día 23 de Junio. Las zapatillas encontradas en uno de los allanamientos fueron reconocidas como de su propiedad, como así también la escopeta tumbera empleada en el robo.
Más tarde, el Juzgado de Menores, también determinó la detención de dos de los tres menores aprehendidos y su posterior traslado al Instituto de Menores, El Amanecer, que se encuentra ubicado en la ciudad de San Nicolás, y donde permanecían al menos hasta el cierre de esta edición.
La investigación continúa y todavía no se ha podido dar con los integrantes de esta banda, que por cierto, incomoda y mucho a las fuerzas de seguridad.