Sin modificaciones en la balanza, hasta se dieron el lujo de no cobrar
El escándalo desatado tras el robo de la recaudación por pesaje de camiones reveló una modalidad que todavía el gobierno no modificó. La semana pasada, La Opinión fue a constatarlo y se encontró con la sorpresa de que en ese momento no pesaban ni cobraban. En el gobierno también se sorprendieron y evalúan sanciones para el empleado que estaba a cargo.
A casi un mes del asalto a una empleada municipal que reveló la precaria modalidad de rendición del dinero que se recauda a través del pesaje de camiones en la balanza pública ubicada en camino Crucero General Belgrano, el Estado local no sólo no modificó la manera en la que recauda en ese predio sino que hasta se dio el lujo de no cobrar al menos el viernes, cuando La Opinión fue a constatar cómo estaban trabajando.
Fue en horas del mediodía. Un empleado municipal, dependiente del área de Inspección de la Secretaría de Seguridad, a cargo del pesaje de camiones, informó que no estaban pesando, es decir que no cobraban el canon.
El gobierno tiene la obligación de percibir el gravamen, porque así lo establecen las ordenanzas fiscal e impositiva que definen el tributo y disponen el monto, que desde el 1 de enero pasó de 200 a 250 pesos por cada camión. Sin embargo, ese día decidieron no hacerlo.
La medida sorprendió en el propio gobierno, donde evaluaban el inicio de un sumario administrativo para el empleado que atendió a este medio, quien, en ojotas y bermudas, consultó: “¿Pidieron autorización? No se puede ingresar, no tengo autorización” y aseguró: “No están pesando. No le puedo dar información. No tengo orden para dejar pasar a nadie”.
Los camiones ingresaban al predio, pero se iban sin pesar y sin pagar el canon vigente. “Hoy no me cobraron, no sé por qué”, dijo un camionero e informó que “ayer le cobraron a un compañero, con el mismo recibo”, es decir con la misma modalidad que el propio gobierno calificó de “desprolija”.
“Vengan todos los días, así no cobran”, bromeó un camionero de Roque Pérez que estuvo hace unos días y le cobraron, según dijo, con la misma modalidad vigente. “No está el muchacho que cobra”, dijo el transportista, que viaja tres veces por semana a San Pedro, y agregó: “Pero no falta nunca ese”.
En efecto, el ticket que mostró a este medio señala que el lunes 13 de enero pasado, que lleva el número 72062, es igual a los que se utilizaban con la modalidad que explico el director de Rentas, Hernán Abatángelo, cuya área procuraba modificar para mejorar.
“No está el muchacho que cobra” fue la insólita respuesta que le dieron a ese chofer este viernes para informarle que hoy pasaría sin pagar la tasa por “pesaje de camiones o camionetas que trasporten bienes” que San Pedro cobra con especial interés a los camiones areneros.
En la cabina se veían varios empleados municipales, además del inspector en ojotas y bermudas que dialogó con este medio, que finalmente pudo ingresar al predio gracias a la autorización del secretario de Seguridad, Eduardo Roleri.
Hasta que llegó La Opinión, ese mediodía, el canon se cobró. Cuando este medio se fue, retomaron la tarea.
El costo de
cobrar la tasa
En la balanza, según información oficial, trabajan dos empleados: el que atendió a los periodistas en ojotas y bermudas, quien sería trasladado de área, y otro más, que trabajan ocho horas de lunes a viernes más sábado al mediodía. El pesaje comienza, según informaron los areneros que pagan, a las 6.00 de la mañana y persiste hasta las 22.00. Son 18 horas.
A esos dos empleados de la cobranza se suma la coordinadora, Carolina Moré, que cobraba un proporcional por esa coordinación y la responsabilidad del dinero que le robó un motochorro en la puerta de su casa tras varias horas de “paseo” en su auto.
Sin embargo, hay alrededor del pesaje de camiones una multiplicidad de trabajadores abocados a hacer cumplir la ordenanza que establece que los transportistas, sobre todo los areneros, deben pasar por la balanza.
Alquilar el predio le costó al Estado local en 2019
$ 2.775.180, según informó el director de Rentas, Hernán Abatángelo. “Ese es el monto de alquileres que incluye el predio, galpón y balanza”, explicó y consideró que “el 50 % le corresponde a pesaje y el 50 % a guarda de vehículos secuestrados”.