Sin juego pero con orgullo, Náutico fue tercero en el Final Four
El Celeste no tuvo un gran fin de semana en Los Cardales donde perdió ante Ingeniero Raver y Arenal, escolta y campeón respectivamente, y llegó al domingo sin chances de pelear el título por lo que con la victoria ante Peñarol sólo le alcanzó para subirse al podio.
Un equipo que quiere ser campeón debe mostrar un buen nivel en los partidos importantes y lejos estuvo Náutico de su mejor versión en el Final Four de la división B de la Asociación Zárate-Campana (ABZC) en el que compitió entre el viernes y domingo en Los Cardales y ganó sólo un partido por lo que se ubicó tercero al igual que en 2018 pero con el sinsabor de haber quedado fuera de la discusión rápidamente.
A pesar de que el Celeste llegó en un buen momento y con su plantel completo, todo lo que intentó el fin de semana le costó. En defensa tuvo muchas desconcentraciones, se le dificultó tomar los rebotes para contraatacar y, por momentos, sufrió en demasía los ataques de sus rivales que le anotaron constantemente, sobre todo en los primeros cuartos. Adelante, careció de ideas para generar juego en base a que no compartió el balón y apostó en demasía a las individualidades. Incluso, cuando salió de ese libreto falló tiros cómodos que, en el desconcierto, colaboraron a que los jugadores pierdan confianza y la incertidumbre se agrande.
En las derrotas del debut ante el local, Ingeniero Raver, 78 a 58; y en la segunda presentación ante el posterior campeón, Arenal de Ingeniero Maschwitz, 74 a 55; y la victoria frente a Peñarol de Pilar 71 a 67 el trámite fue muy similar porque en todos tuvo malos inicios y remontó desventajas mayores a veinte unidades pero sólo le alcanzó para doblegar, en el último cotejo, a un Milrayitas agotado físicamente por el trajín que no pudo frenar el vendaval de un rival hambriento.
Si hay algo para rescatar del plantel de San Pedro es que, a pesar de las adversidades y lo dificultoso que le significó seguir compitiendo sólo por el honor, nunca se entregó y, con orgullo, luchó siempre hasta que sonó la chicharra, sobre todo el domingo al que llegó sin chances de nada y debió mentalizarse de que el tercer puesto, en ese marco, era lo que tenía conseguir.
En los tres días, Martín Gálvez utilizó catorce jugadores: Fausto Segalat, Federico Parra, Joaquín Gómez, Maximiliano Lococo, Matías Machicote, Emir Diamante, Martín Fernández, Tomás Nakama, Juani Tosso, Alejo Mitidieri, Francisco Garibaldi, Rodrigo Bravo, Joaquín Pintor y Thomas Watson, todos surgidos de la cantera del club.
En el Torneo Oficial de la ABZC Náutico fue irregular y le faltó ajustar en los detalles para ganar más partidos importantes, sobre todo en el Final Four donde el Arenero se quedó merecidamente con el ascenso con un elenco con jugadores de mucha trayectoria en la liga tras derrotar en la definición a Ingeniero Raver (quedó como escolta y jugará el repechaje por el segundo boleto a la A contra Defensores Unidos de Zárate) y arruinarle la fiesta que armó en su gimnasio de pequeñas dimensiones que colmó de público todas las jornadas.
En ese marco, el Celeste terminó la temporada en la misma ubicación que en 2018 y siendo protagonista como cada año desde 2011 cuando se afilió a la ABZC. Sin embargo, le quedó el sabor amargo de saber que estaba para algo más que volverá a buscar en la próxima temporada con, seguramente, muchos de los mismos basquetbolistas.