Si no cambia, el Inspector “se tiene que ir”
El fracaso en el ordenamiento de Inspección General y el caos en el tránsito, podrían llevar a retomar un viejo proyecto del fallecido Concejal Meglio.
El Inspector Babbini parece estar orando por un milagro para solucionar los crecientes problemas que tiene en su área. Pasados varios meses desde su asunción, el 23 de Enero del año en curso, todas las expectativas se han diluido y las esperanzas de ordenar el tránsito sucumbieron con el famoso Plan Traverso al que la calle con sabiduría ya nomina como el Plan Solo Verso.
Sin que medien explicaciones, el Ejecutivo Municipal y su Secretario de Gobierno, han logrado eludir las explicaciones sobre tantas reuniones y anuncios sin que la oposición les pregunte, qué es lo que se va a planificar o a hacer con respecto al tránsito.
Un memorioso ex concejal, se comunicó con La Opinión para recordar, el rechazo que sufrió la iniciativa que en su momento presentó el fallecido Concejal Jorge Meglio.
Durante su gestión, en representación del MODIN que lideraba Aldo Rico, propuso poner en marcha un sistema mixto de control de tránsito, en el que alguna empresa con afán de recaudación realizase intervenciones para mejorar el sistema de multas.
Por supuesto, la iniciativa fue rechazada bajo las “convicciones ideológicas” que señalan que es el Estado quien debe velar por estas cuestiones.
Meglio había tomado como modelo las experiencias realizadas en otras comunas, en las que los resultados habian sido exitosos.
Me despido de la vida
Aunque parezca exagerado, quienes deben manejar un vehículo o simplemente transitar a pie la ciudad, tienen esta sensación de despedida cuando abandonan sus hogares sobre todo en los horarios “pico”.
Motos y bicicletas en contramano, autos en doble fila, camiones de reparto con las balizas puestas en arterias céntricas y fuera de horario, camiones cargados con fruta o cereal que se pierden y entran por Mitre y doblan por San Martín, hombres y mujeres que se insultan porque uno estaba pasando el semáforo en rojo y el otro venía en un ciclomotor con dos criaturas encima. Se dicen “casi me matás”, como si alguno de los dos tuviese razón.
No hay modo, de explicar lo sucedido con el estacionamiento medido que afortunadamente, ahora, tomarán a su cargo los bomberos. Ese es el panorama que hoy presenta el área que hace unos meses dijo que “todo es cuestión de tiempo y nada es tan grave como parece”.
Las multas en el Juzgado de Faltas se acumulan y en muchos casos no pueden llegar a aplicarse por la mala confección de las actas realizadas por los inspectores. No vale la pena seguir abundando en detalles, sino simplemente contar que las compañías de seguros y el negocio de los abogados “especialistas en accidentes” crece de manera pavorosa.
Para muestra basta un botón
Hace pocos días un ciudadano que transitaba en su automóvil con su familia, fue embestido por una moto en la que se desplazaban dos personas. Ambas se lastimaron a consecuencia de la caída. Fueron trasladadas al Hospital, una de ellas fue dada de alta en forma inmediata, mientras la otra permaneció en observación.
El conductor del vehículo, como corresponde, acudió para interiorizarse por el estado de las víctimas, incluso antes de realizar sus trámites en la sede policial. Cuando llegó, no solo encontró al paciente en observación sino a un futuro litigante, sin que aún se conociesen los detalles del accidente. “Igual vamos a arreglar si tenés seguro, porque pierde el que tiene el rodado mayor” le avisaron, sin anestesia agregando “por la parte penal vamos a arreglar”. El conductor del vehículo, no solo pensó en los trámites que aún le aguardaban con peritos, testigos, taller de chapa y pintura y por supuesto, el mal trago, sino en su condición de “criminal”, pese a que lo habían chocado.
Al día siguiente, también se preocupó por saber el estado de salud de los lastimados. Ya estaban ambos en sus domicilios. Con gran tranquilidad, por tener su seguro al día y contra todo riesgo, se retiró del lugar. Minutos después le advertían que “por la parte del seguro, todo bien”, pero falta la cuestión penal “que la arreglamos de algún modo, porque puedo hacer que este tipo desista de acusarte penalmente, después pasate por el Estudio y lo vemos”. Esa fue la frase que utilizó un “profesional de la abogacía” para intentar hacerle creer al dueño del auto que “por unos pesos se podía sacar el juicio penal de encima”.
Hay cientos de casos que se terminan arreglando de esta manera y con el silencio de los protagonistas que saben, que si mencionan a los abogados o sus secuaces “pasadatos” corren el riesgo de enfrentar un largo proceso judicial. Por el momento, el Colegio de Abogados y su tribunal de ética sigue brillando por su ausencia.
“Se tiene que ir”
Desde el propio Gabinete de Barbieri, la situación se describe como “insostenible” de cara a las elecciones de Octubre. “La oposición nos perdona la vida”, dijeron desde el riñón de quienes se encolumnan detrás de algunos cambios drásticos antes del 28 de Octubre y no solo en esa cartera. “Se tiene que ir” es el comentario que antecede a la cuestión más importante, no hay en el horizonte soluciones de fondo al tema del control de tránsito y el ordenamiento de Inspección General. Mirar las estadísticas de accidentes diarios, es un motivo más que importante para que se tomen medidas a corto y largo plazo y en conjunto con la oposición.
Accidentes S.A.
Un párrafo aparte merecen los profesionales de la abogacía que tienen conexiones directas con quienes acuden a menudo a los accidentes. Este medio ha publicado varias notas denunciando la obscena actitud de los “espías” a sueldo que llegan a la Guardia del Hospital o a la Comisaría antes que los familiares de los accidentados. Hay al menos dos estudios jurídicos que tienen guardia permanente y por lo menos otros tres, que pelean por el liderazgo. Si la víctima no tiene recursos, le ofrecen adelanto “a cuenta de lo que van a cobrar” y con ello se aseguran el caso. Pese a la toma de estado público, la única precaución que se ha tomado es colocar un cartel en la Comisaría en la que se advierte “Ud. Tiene derecho a elegir su abogado”. Por parte del Hospital, no se han generado acciones que impidan o al menos investiguen la presencia de los “pasa datos”.