“Seguimos sosteniendo que Lucas es inocente”
Los familiares de Lucas Crispien siguen luchando para demostrar que el detenido por el homicidio de Cresta es inocente. La defensa presentó una oposición a la requisitoria de elevación a juicio y solicitó su sobreseimiento.
Semanas atrás se conoció la noticia que fue elevada a la Fiscalía de Juicio de la Dra. Gabriela Ates la causa donde se investiga la muerte de Joaquín Emanuel Cresta, un menor de 17 años que fue asesinado el 13 de septiembre del año pasado en una vivienda de Aulí al 1000.
Actualmente la causa está siendo evaluada y se trabaja desde distintos aspectos para llegar a la verdad. Mientras tanto la familia Crispien, sostiene que Lucas, el único sospechoso y detenido es totalmente inocente. Aseguran contar con datos y testigos que serían muy valiosos para la causa.
El Fiscal Ariel Tempo es quien estuvo a cargo de la instrucción y según los familiares ha omitido distintos testimonios y relatos que según ellos fueron por demás de certeros. El Defensor Oficial del acusado, Dr. Javier Parigini, presentó ante el Juzgado de Garantías Nº 2 la oposición a la requisitoria de elevación a juicio e instar el sobreseimiento.
En su presentación, el Defensor sostiene que existe una investigación insuficiente que no logra demostrar la autoría y responsabilidad en el hecho. Que no se han conseguido elementos probatorios que permitan sostener la acusación. El profesional entiende que allí solo aparecen pruebas de auto que acentúan lo que la parte sostiene, que el sospechoso no tiene nada que ver ya que el día y hora en que se produjo el hecho se encontraba en el domicilio de otra persona, y que este dato ha sido comprobado con testimonios concordantes.
La única prueba que utilizó el Fiscal para acusar a Crispien es el testimonio del joven que habita en la casa donde fue asesinado Cresta, quien sostiene que fue este quien disparó contra los jóvenes que allí se hallaban. Pero para ser más contundente con su pedido, Parigini se fundamenta también en el testimonio de una persona que aportó datos precisos sobre las identidades los supuestos homicidas que nada tienen que ver con Crispien.
Particularmente, esos dos nombres que fueron aportados, coinciden con los que fueron también vinculados al asesinato de Leonardo López, ocurrido ese mismo día pero en la madrugada. De ser así volvería a tomar forma la hipótesis de la venganza por el homicidio de este, acontecido a pocos metros de donde murió Cresta.
Como se recuerda el hecho se produjo cerca de las 23.00 horas, a dos cuadras de donde se produjo la muerte de López. Joaquín Emanuel Cresta tenía 17 años y según testigos, dos personas que se movilizaban a bordo de una moto gris fueron las que dispararon a su paso sobre un grupo de jóvenes que se encontraba en el patio de una vivienda de la calle Aulí al 1080, propiedad de la familia Farías.