Río Tala: Trabajadores permanecen en la fábrica Saladino y denuncian vaciamiento ante el Ministerio de Trabajo
Los 15 empleados de la fábrica recicladora de plástico para la fabricación de bolsas permanecen desde este domingo dentro de la fábrica, luego de detectar que el dueño intentaba vaciar la planta. El titular del Sindicato de Químicos, que los representa, presentaba este lunes una denuncia ante la delegación de la cartera laboral. Los trabajadores esperan cobrar lo que les deben y no descartan la posibilidad de recuperar la empresa por sus medios.
Desde este domingo, la planta recicladora de plásticos para la fabricación de bolsas Saladino, ubicada en Río Tala, permanece tomada por sus trabajadores, que detectaron el intento de vaciamiento de la empresa e impidieron que se llevaran las máquinas.
Los 15 empleados, a quienes los titulares les adeudan entre dos y tres meses de salario —últimamente les pagaban por kilo—, decidieron quedarse en el interior de predio y sus representantes sindicales, del gremio de los Químicos, presentaban este lunes una denuncia ante la delegación local del Ministerio de Trabajo por el caso.
Desde la CGT, el secretario adjunto de los Municipales, Raúl "Chipi" Benítez informó que la familia Saladino abandonó la vivienda donde residían en San Pedro. "La casa está vacía, querían vaciar la fábrica y desaparecer del mapa, que es lo que hicieron", señaló.
La central obrera fue advertida el domingo por la mañana de la situación, cuando una persona en una camioneta —que sería quien habría adquirido las herramientas— intentaba cargar las máquinas para llevárselas, lo que fue impedido por los trabajadores.
En el Ministerio de Trabajo, el secretaio general del sindicao de Químicos, Alberto Ramírez, fue a denunciar el vaciamiento de la empresa y a advertir que los trabajadores se van a quedar hasta tanto haya respuestas. "Estos chicos quieren seguir trabajando, iban a averiguar para armar una cooperativa y recuperar la fábrica", aseguraron sindicalistas de la CGT.
La fábrica, cuyo titular registral es Axel Federico Saladino pero quien comanda el funcionamiento es su padre, Néstor José Saladino, ya fue epicentro de conflictos cuando en abril pasado sus trabajadores, la mayoría venezolanos sin documentación regular, cuando se reveló que, además, sus dueños habían dejado un verdadero "tendal" de cheques sin fondos.