Rendición de Cuentas 2020 aprobada sin los votos del Frente de Todos y con la mayoría de Juntos por el Cambio
El Concejo Deliberante aprobó el expediente en sesión especial este lunes. Martín Pando fue el encargado de defender la gestión de Cecilio Salazar y Martín Baraybar cuestionó, desde el bloque que preside, la administración del intendente.
Este lunes, en sesión especial, el Concejo Deliberante trató la Rendición de Cuentas 2020, el ejercicio económico del primer año del segundo mandato del intendente Cecilio Salazar, signado por la pandemia de coronavirus COVID-19.
El jefe comunal logró que las cuentas sean aprobadas gracias a los 12 votos del bloque Juntos por el Cambio que integran los ediles de su partido Fe, de la UCR y del PRO, que levantaron la mano para acompañar el expediente.
Por su parte, los cinco ediles del Frente de Todos presentes en sesión —Gastón Casco está aislado tras ser diagnosticad con COVID-19— votaron en contra en el recinto.
En su alocución hizo referencia a las dificultades económicas que atraviesa el país en la gestión de Alberto Fernández y destacó la tarea del intendente local para el abordaje de las finanazas municipales en plena pandemia.
Por la oposición, el vocero fue el presidente del bloque, Martín Baraybar, quien cuestionó la administración de los recursos públicos por parte del intendente e hizo hincapié en la inyección de recursos provinciales y nacionales que permitieron que las cuentas no repitieran los déficits de otros años.
Entre los cuestionamientos, Baraybar señaló que el porcentaje de los recursos de libre disponibilidad destinados a la masa salarial siguió elevado a pesar de que el año pasado no hubo aumento para los trabajadores municipales sino hasta fin de año.
Como analizó La Opinión, la Rendición de Cuentas del ejercicio 2020 del Gobierno de Cecilio Salazar arrojó un resultado que puede calificarse como “de equilibrio” para un año tan complejo como de la pandemia, con un déficit o un superávit —según se quiera leer el resultado, que no deja de ser ínfimo— que se ubica entre el 1,5 y el 3 por ciento del total del Presupuesto.
Las administraciones de Alberto Fernández y Axel Kicillof inyectaron alrededor de 200 millones de pesos a la de Cecilio Salazar. De ese monto, hay $ 96,5 millones que llegaron como préstamo y que deben ser devueltos en 18 cuotas desde diciembre de este año.
La deuda flotante fue de alrededor de 164 millones de pesos, de los cuales 126 millones corresponden a “cuentas comerciales a pagar” y 10,7 millones a contratistas.
“No sólo se trató de ayuda externa, también desde el Municipio se extremó el control de los gastos, como así también se profundizó la implementación de medidas tecnológicas para recobrar la recaudación perdida”, destacó el Gobierno en la Rendición de Cuentas elevada al Concejo y que fue aprobada este lunes.
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