Remises truchos, desarmaderos y robo de autos, una trama para investigar
Un auto volcó y la policía detectó que se trataba de un vehículo robado en el conurbano en mayo. El día del accidente, el chofer trasladaba a una pareja que había requerido un viaje a una agencia de remises no registrada. La investigación procura establecer la relación de las remiserías truchas con los desarmaderos y los robos de autos en la zona norte de la provincia.
Pasó como un accidente más, pero no lo fue. Por muchas cosas: pudo haber sido una tragedia, ocurrió en medio de un festival que convocó a una multitud y fue protagonizado por un automóvil que resultó ser robado. El vuelco de un remís trucho en la zona de Villa Jardín parece que dejará mucha tela para cortar.
El hecho ocurrió el sábado por la tarde a la altura del almacén 9 de Julio, donde un Fiat Siena volcó luego de que su conductor, un trabajador de una agencia de remís perdiera el control. En la ocasión, llevaba dos pasajeros que tuvieron que ser asistidos con lesiones menores en el Hospital.
La policía detectó rápidamente que el remís no estaba habilitado como tal. Aunque las primeras declaraciones indicaron que trabajaba “de manera particular”, con el correr de las horas crecieron las sospechas de vinculación del remisero con una agencia no registrada muy conocida en la ciudad.
Como si fuera poco, el remís sin habilitación de la agencia irregular presentaba pedido de secuestro activo por el delito de robo. Había sido denunciado como sustraído en el mes de mayo en el conurbano bonaerense, en una causa que tramita en la fiscalía 7 del departamento judicial Moreno – General Rodríguez.
A los investigadores del caso hay muchas cosas que no le cierran. Un auto robado trabajando como remís trucho para una agencia trucha implica demasiadas irregularidades que nadie detectó, por lo que la investigación no se agota en el aviso a la fiscalía del Gran Buenos Aires.
Ahora, la tarea es averiguar por qué ese auto robado en el conurbano terminó en San Pedro y trabajando como remís en una agencia sin habilitación. No sería la primera vez que ocurre una situación de estas características y quienes conocen ese submundo están alertas.
Entre quienes tienen a su cargo las pesquisas para reconstruir el entramado que rodea a esta causa consideran que podría haber vinculaciones entre una red que opera en toda la zona norte de la provincia de Buenos Aires para robar automóviles.
En San Pedro ya hubo un allanamiento que despertó esas sospechas, en un taller mecánico en el que estaban “vistiendo” un Fiat Siena con las partes de un auto que había sido robado días antes en Zárate.
Luego, a los pocos días, la policía desbarató un desarmadero clandestino en Baradero, en donde hallaron una gran cantidad de autopartes que correspondían a vehículos robados en la región y en el conurbano bonaerense.