Reconstruirán el accidente que derivó en la muerte de Ayelén Navarro
A principios de diciembre habrá una nueva pericia accidentológica. La joven de 15 años y su novio chocaron en moto con un patrullero. Ella fue internada en Buenos Aires, donde tras una operación contrajo el síndrome Steven Johnson, que le costó la vida. Hubo marchas pidiendo justicia.
Mientras se aguarda el arribo de los exámenes y pericias efectuadas en torno al fallecimiento de la adolescente Ayelén Navarro, la Justicia dispuso nuevas medidas en torno al caso, que tiene dos caminos de análisis vinculados por un lado al accidente que derivó en su internación y por el otro a la situación hospitalaria que implicó su muerte.
El 3 de diciembre próximo se cumplirá con la pericia accidentológica que buscará determinar cómo sucedió la colisión entre un patrullero de la Policía Bonaerense y la moto en la que circulaba la joven de 15 años junto a su novio.
La Justicia ordenó la reconstrucción del hecho, que tuvo lugar el 3 de julio pasado en la intersección de Dávila y Bottaro, con el fin de establecer las responsabilidades del caso, teniendo en cuenta que hasta el momento hay versiones encontradas al respecto.
Ayelén Navarro murió en un hospital de Capital Federal donde permaneció internada después de contraer el síndrome de Steven Johnson.
La extraña enfermedad se le despertó tras consumir un anticoagulante que le recetaron luego de ser intervenida quirúrgicamente por el golpe que recibió en su cabeza durante el accidente.
Por este caso existen dos causas en trámite: una que invetiga si hubo un caso de mala praxis en su atención médica, por lo que a pocos días del fallecimiento el Fiscal interviniente ordenó secuestrar las historias clínicas de la joven que pasó por varios sanatorios antes de fallecer; y otra por el accidente que originó las lesiones, en cuya investigación se enmarca la reconstrucción ordenada.
Desde el deceso de la menor a la actualidad, familiares y amigos realizaron varias marchas en pedido de justicia. Entienden que la policía es responsable de la muerte de la joven ya que “si no hubiese existido el accidente Ayelén no habría contraído el síndrome”.