Preocupación por los enfrentamientos armados
En la madrugada del domingo, tres jóvenes sufrieron diversas heridas tras un enfrentamiento. Este hecho se suma a otros de características similares que se vienen sucediendo.
Los vecinos lo venían anticipando pero al parecer nadie lo pudo evitar. “Se reúnen en las esquinas del barrio, fuman y toman delante de todos sin que nadie les diga nada” decían algunos de los reclamos. Finalmente en la madrugada del domingo, la esquina de Javier Rivero y Aulí en pleno barrio San Miguel, fue escenario de un grave hecho de abuso de arma que terminó con tres personas heridas.
Una situación que convocó a una buena cantidad de patrullas policiales, además de causar alarma entre los vecinos que atemorizados dentro de sus casas, sabían poco de lo que había pasado. Sí estaban seguros de que se habían escuchado gritos y varios disparos de arma de fuego.
Esta clase de episodios se reiteran, principalmente los fines de semana, y en su mayoría son jóvenes con antecedentes que no superan los 22 años de edad. Se advierte también la participación de menores que transcurren impunes por ser inimputables.
La policía informó que no se sabe con certeza, cuales fueron los motivos que originaron los incidentes. Se estima que en estos casos nunca hay una cuestión en común, se trata de enfrentamientos que a veces no tienen motivos o si los hay, muchas veces son insignificantes, pero bastan para que sea una riña.
Un familiar de los heridos aseguró que los tres chicos venían del baile, “Cuando llegaron a la esquina fueron emboscados por el otro grupo en donde la mayoría eran menores”.
Tras el episodio de la madrugada del domingo, Néstor González de 22 años, fue quien llevó la peor parte ya que recibió una perdigonada en el tórax. Este joven se encuentra internado en el Hospital local con pronóstico reservado. Sebastián Miño, de 19 años, también fue trasladado de urgencia a la guardia del Hospital. Este joven debió ser intervenido por una herida de arma blanca sufrida en la zona del abdomen. En tanto otro joven de 18 años, también con lesiones, se encuentra hospitalizado.
El Capitán Pedro Biaín informó que la policía secuestró las armas utilizadas en el hecho y además se determinó que los tres jóvenes heridos se encontraban en estado de ebriedad, grado dos.
Recuperación
Braian Corcorán de 19 años de edad, se recupera de las graves heridas sufridas a mediados de la semana pasada cuando fue alcanzado por una perdigonada. El joven sufrió heridas en diversas partes del cuerpo como consecuencia de un disparo efectuado con una escopeta. Los perdigones le provocaron lesiones de importancia que obligaron a su asistencia en el Hospital local, donde debió ser intervenido ya que tenía afectado varios órganos vitales, como estómago e intestinos. Permaneció en terapia intensiva y entubado por varios días hasta que comenzó a evolucionar favorablemente.
El hecho se registró el miércoles de la semana pasada, alrededor de las cuatro de la mañana cuando la víctima se encontraba en una casa de Ayacucho al 1300. Este habría escuchado varias detonaciones sobre el frente de la vivienda, por lo que decidió salir para ver que pasaba. Allí fue cuando recibió la perdigonada.
Al día siguiente, la policía logró detener a dos jóvenes acusados de ser los autores de los disparos. Uno de ellos tiene 18 años y sería el autor material del episodio, mientras que su hermano de 16 años, fue el otro detenido que, como consecuencia de su edad, recuperó su libertad a las pocas horas. Se sospecha que al momento de producirse el tiroteo, eran varios los menores que acompañaban a los detenidos.
La policía continúa investigando el hecho pero se presume que se trataría de un ajuste de cuentas o alguna cuestión parecida.