Positivo – Negativo
Mientras mis camaradas Roleri y Agüero piensan en sumar a Brigada A y Sheriff Lobo para reforzar la seguridad de la próxima sesión del Concejo Deliberante, y defenderse así de los embates sistematizados de los temibles Santiago Burgueño, el “Patón” Basualdo y el “Ñato” Esterlich, la vecindad espera que se disponga de la misma cantidad de personal para custodiar al resto del pueblo que ya está podrido de la inseguridad que reina en todo San Pedro.
Hemos tenido un fin de semana movidito porque los muchachos salieron a divertirse pero no con la música sino con las vidrieras. A dos negocios en el trayecto de 3 de Febrero del 2000 al 2200 les “hicieron bolsa” los blindex. Pero lo peor es que revolvieron todo en el interior y se llevaron un poco de todo, dinero y otras cosas más. Estudio de Jardinería y la mueblería Capri fueron los negocios afanados. De los culpables no se sabe nada, yo me había hecho el bocho con las cámaras del centro de monitoreo y como en Crucero Gral. Belgrano y 3 de Febrero hay una pensé que habían agarrado algo pero parece que en ese momento la “súper moyion” estaba apuntando para otro lado. Parejito lo del centro de monitoreo, no agarran una.
Si hay hambre que no se note y los amigos de lo ajeno se aseguraron varias cenas y varios almuerzos. Del criadero de la familia Parra en Río Tala se llevaron todo, como 30 lechones. Varios pibes se metieron en el lugar y mataron ahí mismo los animales para llevárselos como si nada pasara. ¿Ustedes quieren saber qué hacen con los lechones robados? Bueno, si mi jefe me deja a lo mejor la semana que viene les cuento, aunque seguramente habrá varias ofertas anotadas en los pizarrones de algunos negocios de la ciudad.
Ah, me olvidaba. También en Río Tala pero a metros de las vías, sobre el callejón de Fusi, una familia fue asaltada y robada. Dos o tres encapuchados los agarraron de noche y hasta al bebé de la familia le apuntaron.
Y hablando de la zona rural, hubo un robo cerca del aeroclub donde los delincuentes cortaron alambrados y se llevaron desde una bicicleta, varias gallinas y otra cantidad similar de conejos.
Los motochorros siguen haciendo de las suyas y roban por todos lados. Van de a dos y hasta de a tres en las motos y se las agarran con cualquiera. Hace unos días a una mujer le quisieron sacar la riñonera, la tiraron de la moto y la arrastraron varios metros lastimándole la cara y los brazos. Después hubo varios casos en donde les arrebataron las mochilas a los menores que salen de las escuelas y clubes, o como en la noche del domingo que sorprendieron a una profesional en la puerta de una casa en “ciudad abierta” y cuando llegaba e iba a bajar la sorprendieron y le llevaron el bolso con pertenencias, forcejeó pero no pudo zafar y se llevaron todo. Ahora yo me pregunto… ¿Agarrarán a alguno alguna vez?
Al que le salió mal la novela fue al “Mafia” Olmos, el testigo del caso Gomila. Todos los días reclama algo distinto y ahora se tomó el trabajo de filmarse para avisar que se iba a matar y hasta mostró la escopeta de dos caños con la que se tiraría, desesperado por falta de protección. Muchos vecinos se conmovieron y pidieron ayuda para él y su familia.
No se entiende mucho qué es lo que quiere pero el Fiscal Marcelo Manso mandó a desarmarlo por si las moscas pero fue demasiado tarde. Prefectura, que lo custodia a sol y sombra fue, cortó la calle y le allanó la casa al empleado municipal pero no encontró nada. O no buscaron bien o el “Mafia” aprovechó que los custodios estaban “cazando pajaritos” y se sacó la escopeta sin que nadie lo viera.
Durante varios días una familia de “usurpadores compulsivos” volvieron a hacer de las suyas y según me chiflaron detrás de los golpes, amenazas y mentiras se esconde un seductor negocio inmobiliario apuntalado por reconocidos profesionales que están atentos a todo. En sólo una semana hubo varios despelotes en esa esquina pero nadie cuenta la posta y cuando las papas queman miran para el costado. La dirección: Chivilcoy y Pavón, apetecible hasta para un edificio.
Y como para ir terminando, desde esta humilde columna semanal nos vamos preparando para la próxima entrega. No perdemos de vista los casos más emblemáticos que azotan la ciudad, como el del Jardín Belén, ni lo del “experto” acusado de abuso contra su sobrina que escribió un libro contando lo que le pasó. Tampoco perdemos de vista el “caso Figueroa” y las peripecias que le tocó vivir a un familiar cuando fue a declarar a la Fiscalía, donde esperó y esperó y después de varios minutos le dijeron que vuelva al otro día. Porque por ese mismo caso también queremos saber quién le sacó la foto a la mujer muerta adentro de su casa y se dedicó a difundirla como si no hubiera pasado nada.
¡Ah!… Me había olvidado de contarles algo del cura Carlitos, “el que parece no estar pero está”. Quien con la amabilidad que lo caracteriza no quiso recibir una carta de la familia de “Papacho” Miño en la que le pedían que saque del Socorro al profe que atropelló y mató al joven el año pasado. Va a ser peor ahora porque la familia contrató a un abogado de casos famosos y les va a salir con los tapones de punta.
#PumDeCebita