Por teléfono, otra vez el “cuento del tío” a jubilados
Al menos dos robos bajo esta modalidad fueron denunciados el fin de semana. Además hubo otros llamados cuyas víctimas se dieron cuenta de qué se trataba.
Los llamados telefónicos para estafar y robar a adultos mayores regresaron con fuerza en los últimos días. Una gran cantidad de jubilados recibieron llamados con distintas modalidades del “cuento del tío” o secuestros virtuales.
En algunos casos, las víctimas notaron que se trataba de un engaño. En otros, los delincuentes lograron su cometido y embolsaron ingentes sumas de dinero.
Al menos dos casos fueron denunciados durante el fin de semana. En cada uno, el engaño tuvo como objetivo hacerse de la jubilación recién cobrada o de los ahorros de toda unavida.
La Opinión tuvo noticia de al menos otros tres hechos similares en los que adultos mayores sospecharon que los estaban engañando y lograron esquivar el latrocinio.
“Evidentemente alguien está usando algún tipo de base de datos que les permite obtener domicilios y números de teléfono de jubilados, porque todos los casos tienen esa similitud: saben a quién están llamando”, confiaron fuentes judiciales.
“Hay que cambiar los dólares”
Así le dijeron a una mujer de 87 años. La voz en el teléfono decía que era su nieto y que su madre estaba en el banco, “con el gerente”. “Mamá me pide los dólares que tenés, que los van a cambiar”, le dijeron.
“Ellos juntaron todo, todos sus ahorros, pasame los números del billete, ahora te paso los códigos, le hicieron anotar 20 mil números, como para apabullarla”, contó a La Opinión Alicia, hija de la víctima.
Le dijeron que un empleado de la entidad bancaria iría a buscar el dinero. La mujer se quedó esperando en la vereda hasta que vio llegar a un automóvil blanco que estacionó a media cuadra de su domicilio. El estafador caminó hasta ella y se fue con la plata. “Los ahorros de toda la vida”, aseguraron sus familiares.
Aunque la anciana está lúcida y sabía de la existencia de esta modalidad delictiva, la conversación que tuvo por teléfono con quien se hizo pasar por su nieto le pareció verosímil. En general, a las víctimas de este tipo de delitos les cuesta establecer si los datos que los delincuentes conocían acerca de su familia los tenían de antemano o se los fueron sacando a medida que el diálogo transcurría.
“Tu hermana está secuestrada”
El segundo caso trascendió el lunes a través de la información proveniente dela Comisaría local. Una mujer de 70 años resultó víctima de una estafa telefónica, esta vez bajo la modalidad “secuestro virtual”.
La voz que le hablaba del otro lado del teléfono le aseguraba que su hermana estaba secuestrada y que la golpearían si no entregaba el dinero que había cobrado de su jubilación.
Ante el temor que le provocó la situación –las conversaciones de este tipo suelen tener un alto grado de tensión, que obnubila a la víctima– y la verosimilitud del relato, accedió a entregarles lo que le pedían.
Así, la mujer dejó un sobre con el dinero que solicitaban como presunto rescate en la puerta de su casa, tal como le solicitaron que hiciera. Los delincuentes se llevaron el monto depositado en la vereda sin que la víctima pudiera ver quiénes eran.