El hombre de 51 años ingresó en la madrugada del pasado viernes con un severo traumatismo de cráneo. Al ser asistido se advirtió que no se trataba de una caída común, sino que presentaba varias heridas y excoriaciones.
Rodríguez avanzaba en su lucha contra la adicción al alcoholismo, que padecía desde hace 14 años, por lo que su familia asegura que lo sucedido no fue producto de la bebida sino de otra circunstancia más grave.
Apuntan a un grupo de jóvenes que se reúnen a beber en inmediaciones de su casa del barrio Futuro y tienen en jaque a todo el barrio durante la noche, a quienes quizás algo les molestó para que atacaran a Rodríguez a los golpes.
“Hubo vecinos que nos dijeron una cosa, pero cuando pasaron algunas horas, seguramente por temor, se desdijeron y eso nos complica”, señaló una de las hijas de la víctima. “Hoy fue mi papá, pero mañana le puede pasar a cualquier chico del barrio”, advirtió.
El hombre fue asistido por una ambulancia del servicio 107 luego de que una vecina advirtiera que se encontraba malherido en la vereda de su casa ubicada en la Calle 62 del mencionado barrio. “Creemos que estos pies querían robar a una vecina que vive sola y como mi papá les molestaba lo golpearon”, dijo la mujer.
La autopsia determinó que Rodríguez sufrió un paro cardiorrespiratorio traumático producido por traumatismo encéfalo craneano severo con hemorragia intra parenquimatosa y subdural.
La Fiscala Viviana Ramos tomó declaración a la familia pero ninguno vio lo que sucedió. Personal de la UFI 11 se acercó al lugar del hecho y se encontró con que nadie sabía absolutamente nada de lo que había sucedido.
Por eso la familia reclama que si alguien observó lo que estaba pasando se acerque y denuncie para que la muerte del hombre no quede impune.
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