> Pesar por el fallecimiento de “El Ciruja de las Letras”
Gabriel Abate, vecino del barrio La Tosquera, tenía en su rancho una biblioteca con la que aprendieron a leer muchos niños de la zona. Murió el lunes, a los 90 años, en la clínica de la UOM de San Nicolás después de haber sufrido un ACV.
Abate, trabajador rural durante sus primeros años de adultez y recuperador de la basura después, reveló su pasión por los libros en 2007 cuando el programa de televisión “Sub-SP, relatos de una ciudad oculta” lo encontró en el basural y lo destacó como protagonista de la historia sampedrina.
La difusión de las imágenes provocó que Abate reciba atención médica, jubilación y que pueda abandonar su rancho de chapas, sin agua, ni luz para dedicarse a su biblioteca y así, comenzar con su sueño.
Recién en 2009, después de muchas promesas, cuando representantes del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación visitaron por primera vez su precaria vivienda consiguió todo lo que buscó durante años: salamandra, puertas, ventanas, frazadas y, por supuesto, libros; tantos como para soñar la creación de su biblioteca “Almafuerte”.
Antes de morir pidió que su patrimonio literario sea donado a una escuela o biblioteca pública para que sigan enseñando a los niños.