Perímetro de exclusión para un docente acusado de violencia de género
Tras ser denunciado por solucionar un entredicho a golpes con un anciano, un profesor de una histórica escuela local fue acusado por violencia de género por parte de su expareja. La Justicia determinó un perímetro de exclusión de 300 metros a la redonda y le prohibió la tenencia de armas, porque teme por la integridad física de la mujer. Hay intervención de UCEFF y Servicio Local por que hay menores en el medio.
El Juzgado de Paz Letrado emitió una resolución judicial para evitar que un profesor de la educación secundaria pública de la ciudad se acerque a su expareja, “conforme la conducta abusiva y violenta” que se le endilga en el marco de una causa por violencia de género que pesasobre él.
Aunque para preservar la identidad de los menores involucrados en la situación no se transcribirá el nombre del docente acusado, baste señalar que no es la primera vez que es denunciado por un hecho de violencia. Hace poco un anciano recibió una serie de golpes desu parte luego de un entredicho por el alambrado de un terreno.
Ahora, la acusación es de una gravedad mayor en la medida en que la resolución del Juzgado de Paz respecto del perímetro de exclusión para evitar que no se acerque a su expareja incluye el temor de que la pueda matar.
Denuncias, ataques y temores
La pareja se separó en 2013, tras diez años de convivencia, con hijos. Ese año tuvo lugar la primera denuncia por violencia de género contra el profesor. Desde entonces hubo una serie de situaciones que no llegaron a la denuncia. En el medio, hubo intentos por recomponer la relación.
Hasta que el lazo de dominación psicológica se rompió y la víctima asumió ese rol que tanto tiempo había ocultado de sí misma y de sus vínculos.
El 5 de diciembre pasado, la mujer, que se desempeña como empleada en una reconocida institución social y deportiva local, radicó una nueva denuncia en la Comisaría de la Mujer, luego de una serie de episodios de los que fue víctima.
Allí dejó asentado que no podía salir sola a la calle sin que el docente la hostigara y el temor de que atentara contra ella, porque la situación era cada vez peor. Incluso sospecha que quien entró a su casa a revolver todo sin llevarse nada puede haber sido su propio exnovio.
En la denuncia contó un episodio que fue fundamental para la decisión de otorgarle la medida de exclusión perimetral. En una oportunidad, su expareja fue protagonista de un accidente de tránsito, ocasión en la que blandió un revólver calibre 22, viejo, para amedrentar a quien lo chocó. Incluso habría efectuado disparos.
En la calle se lo suele ver, no pocas veces a altas velocidades en un auto de alta gama de esos cuya aparición en una esquina causa asombro.
Una trama complicada
La última denuncia de la víctima contra el profesor violento es tan o más grave que las anteriores. Un expediente iniciado en el Juzgado de Paz bajo el patrocinio de un reconocido estudio de abogados local solicitó al denunciado que restituya a su hogar materno a suhijo de 11 años, puesto que desde hace dos semanas que, en ocasión en que correspondía quedarse a dormir en lo del padre por trabajo en horario nocturno de la madre, no regresó.
La mujer no pudo ir a buscarlo, porque así lo establece la medida de exclusión. De la misma manera, no pudo participar del acto de colación de la escuela Primaria, ya que el padre trabajaba en el evento y prefirió no interrumpir el contacto.
Aun así, en las redes sociales fue acusada de “mala madre” y de “ausente” por no estar allí. Además, en el perfil de usuario aparecen posteos del tipo “nunca abandones a un hijo por la pasión de un hombre” y otras cosas por el estilo.
Según consta en la denuncia, el profesor está acusado de robar contraseñas que le habrían permitido ingresar a las cuentas en internet de su expareja, donde habría encontrado conversaciones de chat entre ella y un exnovio de la adolescencia.
En cada caso, la denunciante solicitó la asistencia profesional de UCEFF y Servicio Local de Promoción y Protección de los Derechos del Niño. Al cierre de esta nota, la restitución del menor no había sido ordenada, a pesar de que en el convenio en materia de alimentos, tenencia y régimen de visitas que ambas partes firmaron en 2013 quedó establecido que la tenencia será detentada por la madre.
Una resolución elocuente
El 7 de diciembre, el Juzgado de Paz Letrado local dictó una resolución que da cuentas de la gravedad del caso y del rápido accionar de eseorganismo ante el hecho y las consecuencias que podrían derivar de él.
La medida ordena a que el docente denunciado “cese con los actos de perturbación o intimidación” respecto de su expareja y además le prohíbe “acercarse a un radio menor de 300 metros” de su domicilio, su lugar de trabajo y los lugares que ella frecuente, “conforme la conducta abusiva y violenta” que ostenta.
Como si fuera poco, ordena “la prohibición al denunciado de la compra de armas y se ordene el secuestro de las mismas por el personal policial si el denunciado la portare”. Todo por el plazo de 60 días que puede ser prorrogado si perdura la situación de riesgo detectada.
El día 01 fue el 12 de diciembre, cuando lo notificaron. Ese mismo día en un muro de Facebook comenzó una cuenta regresiva cuyo final no se sabe. El temor del lado de la denunciante es que el día 60, si no hay prórroga, el denunciado pueda quedar librado a la posibilidad de acercarse y de portar armas.