Pedirán la prisión preventiva para el agresor de Luciano Ríos
El joven que fuera herido en el barrio Las Canaletas semanas atrás, declaró el lunes ante una comitiva de la fiscalía N° 7 que se trasladó hasta el Instituto Alpi de la Ciudad de Buenos Aires, donde continúa internado. Pedirán la prisión preventiva para Pablo Merlo, único imputado, que continúa detenido en San Nicolás. La semana pasada, Víctor Hugo Ríos, padre de Luciano, denunció amenazas.
Luciano Ríos prestó declaración este lunes ante una comisión especial de la Unidad Fiscal de Instrucción N° 7 que viajó a la Ciudad de Buenos Aires para entrevistarse con el joven baleado el pasado 25 de agosto.
La fiscal Gabriela Ates adelantó a La Opinión parte de la declaración del joven que recibió tres disparos de arma de fuego, de los cuales se recupera favorablemente.
Según explicó la instructora de la causa “Ríos confirmó que efectivamente fue el detenido, Pablo Merlo, quien le disparó y lo hizo a corta distancia”. Además, Ates indicó que Luciano reconoció la existencia de “una pelea” con su agresor, que tuvo lugar el día previo a que el joven de 19 años lo baleara en un bar de Juan Ismael Jiménez al 2200, tal como asegurara la madre del imputado en el aire de La Radio a pocas horas del hecho.
Pablo Damián Merlo, único imputado, continúa detenido en la Unidad Penal N° 3 de San Nicolás y de un momento a otro la doctora Gabriela Ates, tal como adelantó a este semanario, pedirá la prisión preventiva para el joven acusado de homicidio en grado de tentativa.
Además, la premeditación en el hecho, teniendo en cuanta los dichos que su madre sostuvo que Merlo “no quiso realizar la denuncia” por la golpiza recibida el día anterior, argumentando que se las iba “a cobrar”, y la ausencia del arma con la que efectuó los disparos continúan siendo motivo de investigación.
Merlo aún no solicitó a la fiscal la posibilidad de prestar declaración indagatoria, luego de que se negara a hacerlo la semana pasada por recomendación de doctor Alejandro Ares y su secretario Francisco Diez, ambos a cargo de la defensa del imputado.
Las amenazas a la familia Ríos
ya están en poder de la justicia
“Hice la denuncia en la fiscalía y en la comisaría”, explicó el dirigente de UATRE y padre de la víctima, Víctor Hugo Ríos, respecto de los mensajes de texto intimidatorios que recibió en su teléfono móvil el pasado viernes y agregó: “Los mensajes dicen que si seguimos con la causa nos va a pasar algo”, y prefirió no detallar el contenido de los mismos, ya que las transcripciones se encuentran en manos de la fiscalía que investiga el origen de las comunicaciones.
Respecto de la salud de su hijo, Ríos indicó que “está evolucionando favorablemente” y explicó que Luciano “levantó las piernas levemente y pudo mover los dedos de los pies”. “Aunque le duele, por el tipo de herida que sufrió, nosotros recuperamos las esperanzas, sobre todo viendo la voluntad que está poniendo Luciano para salir adelante”, aseguró. Cabe recordar que los primeros informes realizados por los médicos del Sanatorio Cemic no eran esperanzadores respecto de la posibilidad de que Luciano vuelva a caminar.
El joven continúa internado en una habitación normal en el instituto de rehabilitación, donde recibe atención del equipo médico, mientras que en los próximos días comenzaría con trabajos de rehabilitación, para los que sería trasladado a otra habitación cercana al gimnasio en el que comenzará con los primeros ejercicios.