Pasaron a disponibilidad al ex jefe de la Distrital
El Comisario Carlos Cocco fue separado de la fuerza por presuntas irregularidades cometidas por el personal de la Policía Vial Junín, en donde se desempeñaba como jefe. Se investiga el cobro de “coimas” y la presunción de “zona liberada”.
Siempre estuvo en la mira y en varias oportunidades, mientras se desempeñó como Jefe de la Policía Distrital en nuestra ciudad, se tuvo que encargar de desmentir trascendidos y versiones que lo vinculaban a distintas irregularidades. “Yo no tengo nada que esconder, que me investiguen”, había dicho Cocco en aquellos tiempos ante las preguntas de la prensa.
Este año, precisamente el 9 de abril, el por entonces todavía Capitán Carlos Cocco dejó en plena madrugada el cargo que ocupaba para cederle su lugar a quien hoy está como máximo responsable de la Policía Distrital, el Inspector Rubén Oroza. Su salida fue tan llamativa como sorpresiva, aunque las versiones sobre su traslado venían ganando la calle y se esperaba que sucediera de un momento a otro.
Cocco fue destinado a la jefatura de la Policía Vial Junín, cargo que ostentó hasta la semana pasada. Apenas siete meses duró el servidor público en su cargo, hasta que la Fiscal Vanina Lisazo decidió intervenir en una causa por irregularidades que lo involucran directamente. La intromisión judicial dio lugar a que Asuntos Internos de la Policía comenzara a investigar la denuncia efectuada por un camionero, quien dijo haber recibido un pedido de soborno para impedir una multa por parte de la policía.
¿Coima o zona liberada?
La investigación está orientada hacia el supuesto cobro de “coimas” de la que habrían participado cuatro policías.
Lo particular de la causa es que todo se desató tras un caso de piratas del asfalto sucedido sobre la Ruta 65, en inmediaciones de la ciudad de Junín el jueves 19 de noviembre. Allí se frustró que un camión cargado con vinos fuera robado con su carga.
El rodado viajaba de Mendoza a Buenos Aires, pero en esa jurisdicción fue interceptado por un grupo de “piratas” sobre la Ruta Nº 7, en el sector conocido como La Agraria. El vehículo y su carga quedaron en manos de uno de los ladrones, quien se trasladó sobre el mismo camino pero en dirección de Ruta Nº 65. Lo que los delincuentes no tuvieron en cuenta fue que en otro camión, pero algunos kilómetros más atrás, viajaba el propietario de la empresa. Este efectuaba el mismo recorrido y advirtió lo que había sucedido con el otro rodado. En ese mismo instante, no sólo dio aviso a la policía sino que decidió perseguir al camión sustraído y realizó una riesgosa maniobra en la que cruzó su camión delante del otro, consiguiendo detenerlo. Mientras tanto, el sujeto que estaba al comando del camión lo abandonó y huyó para perderse en la oscuridad.
Por su parte, el chofer del camión fue subido a un auto y tras viajar unos kilómetros quedó abandonado en jurisdicción de Carmen de Areco.
Lejos de concluir allí, esta historia tomó otro rumbo cuando el chofer que había sido víctima del atraco denunció que al atravesar la ciudad de Junín fue interceptado por el personal de la Policía Vial. Los agentes lo acusaron de no contar con un impuesto municipal que le fue requerido; por ese motivo le iban a tener que cobrar 2.000 pesos de multa. Como dijo no contar con ese importe fue “invitado” a pagar una coima de 500 pesos para seguir su camino, pero el chofer volvió a negarse. Momentos después, el personal policial decidió retirarse pero para sorpresa del conductor, en el mismo lugar donde la policía efectuó el operativo fue donde lo interceptaron los “piratas”.
Es por eso que no sólo se investiga el supuesto pedido ilegal de dinero, sino que se trata de establecer si existió una zona liberada para interceptar el camión luego de que su chofer se negara a “colaborar” con la policía.
Asuntos Internos de la Policía provincial decidió apartar momentáneamente tanto a Cocco como a otros tres policías, hasta que se establezca puntualmente lo que sucedió y si existió complicidad entre los delincuentes y la Policía.
Más separaciones y cambios
En nuestra ciudad también se han producido cambios en distintas dependencias de la Policía. Los mismos no obedecen solamente a una reestructuración sino que existen investigaciones que se han abierto en cuestión a distintos efectivos que protagonizaron diversas irregularidades.
Quien fue desafectado de la fuerza fue el Comisario Patricio Guiñazú, que se desempeñaba como Jefe de la Policía Vial San Pedro con asiento sobre la Ruta 9. Las irregularidades detectadas en un procedimiento donde se secuestró un camión obligaron a la división de Asuntos Internos de la Policía provincial intervenir y separarlo mientras se investigue el caso.
El hecho se produjo hace aproximadamente dos meses y tiene que ver con una llamativa tardanza a la hora de elevar las actuaciones ante la Justicia y al propio dueño del rodado, que tenía pedido de secuestro por robo.
Por otra parte en Río Tala también se produjeron novedades, ya que quien estaba cargo de la dependencia, el Oficial Principal Andrés Careta fue desafectado de la fuerza hasta que no se aclare una situación irregular en la que también fue nombrado el Oficial Germán Olivera, separado a su vez de su cargo momentáneamente. La causa tiene que ver con el faltante de autopartes de un vehículo secuestrado que se encontraba en la Comisaría, durante el turno en que Careta se encontraba trabajando como Oficial de servicio. Mientras tanto, quedó a cargo del destacamento de Río Tala el Oficial Principal Mariano Rodríguez.
Santa Lucía no es la excepción y el Oficial Inspector Carlos Pahuasi se hizo cargo del destacamento en lugar del Oficial Principal Fabián Duarte, quien regresó a cumplir funciones a la Comisaría San Pedro. Pahuasi proviene del destacamento Pérez Millán.
Quienes permanecen en sus cargos son el Teniente Cristian Suárez, a cargo de la patrulla rural Doyle, y el Oficial Principal Facundo Fioravanti a cargo del destacamento Gobernador Castro.
“Que San Pedro denuncie”
Para que no quedaran dudas sobre lo acontecido en Junín, La Radio consultó a la Dra. Vanina Lisazo, responsable de la Unidad Fiscal Nº 6 de ese departamento. “Esto sucedió el jueves de la semana pasada”, dijo la abogada. “Se recibió la denuncia de un chofer que luego de ser interceptado por tres policías, en el mismo lugar y luego que los uniformados se retirasen le fue robado el camión por un grupo de piratas del asfalto. El hombre dijo que antes, los policías, le exigieron una coima de 500 pesos para poder seguir su marcha, ya que le requirieron un impuesto municipal que no tenía y por el cual debería abonar 2.000 pesos”, aseguró Lisazo.
“Pero no esto no fue todo, ya que a los pocos días se recibió una denuncia de instancia privada en la cual una persona aseguraba que también le habían querido cobrar una coima culpando directamente al jefe, en este caso, Cocco”.
“Lo único que pido es que San Pedro denuncie”, reclamó la letrada, quien además aseguró contar con distintas versiones sobre algunas irregularidades efectuadas por el policía mientras estuvo a cargo de la Jefatura Distrital en nuestra ciudad, aunque ninguna de estas fue denunciada. “Que se acerquen a la fiscalía de su ciudad o directamente me la hagan llegar a mí que me servirá para sumar a esta causa”, aseguró.