Pasó la cuarta edición de la Feria del libro
Un espacio cultural abierto a toda la comunidad y para concurrir en familia tuvo lugar la semana pasada en el Centro de Comercio. La convocatoria fue excelente entre las actividades fijas y los invitados que intervinieron sumando propuestas al evento.
Esta nueva edición de la feria del libro “San Pedro Lee” abrió sus puertas entre el jueves y el domingo de la semana pasada, la convocatoria y la respuesta del público local fue muy buena y es notorio cómo año tras año va incrementándose su participación.
En esta oportunidad, varios grupos de niños del jardín de infantes, escolares y adolescentes acudieron a recorrerla además de distintas generaciones de adultos, principalmente para desarrollar una mayor diversidad de actividades propuestas por la comisión organizadora pensadas para atraer diferentes edades e intereses.
El espacio fue aprovechado en su totalidad, la distribución y organización de las actividades mejoraron respecto a ediciones anteriores ya que al montar una gran carpa estructural en el patio, fue utilizado como espacio auditorio de disertación y además se utilizó el auditorio que se encuentra en el primer piso de la institución. Así, propuestas paralelas pudieron desarrollarse independientemente y el recorrido de la muestra con los stands de libros fue mejor apreciado por los visitantes, mucho más despejado incluso para mirar con tranquilidad los ejemplares y comprar.
Actividades más convocantes
En esta cuarta edición, ya contando con tres años de experiencia, las propuestas ofrecidas al público fueron de lo más diversas, intentando cautivar el interés de todos grupos visitantes. También la participación fue muy activa desde la inauguración ya que los alumnos desarrollaron actividades de arte, pintaron la calle con murales y decoraron la entrada fabricando grandes libros con cajas forradas, y armaron con dibujos de niños de jardín la gigantografía.
La apertura fue con un escenario ubicado sobre calle Mitre con la participación de varias delegaciones escolares presentes junto a sus abanderados además de la presencia de autoridades locales.
La obra de títeres propuesta por artistas locales, se presentó con personajes en vivo y fue muy graciosa y concurrida por los niños de jardín, incluso de jardines rurales que tomaron la actividad como un espacio recreativo. Se repitió durante la mañana y la tarde del jueves y viernes.
La lectura del cuento de Rafael Flaiman “De noche” (ver página 2) cautivó el interés y la emoción de los presentes devolviéndole al autor una cariñosa muestra de entusiasmo por su relato. Por otra parte tanto Rafael Flaiman, como la autora de “Las letras por un tobogán”, Mirta Mantovani y Sandra “Chana” Altamirano fueron distinguidos por el Municipio con una placa; en el caso de Mirta y Chana permanecieron en un stand de escritores sampedrinos exponiendo sus obras, en ambos casos se trata de obras infantiles. Otra distinción especial fue para el librero Ricardo Mulleadi de librería San José de Ramallo, que participa desde la primera edición de la feria.
Las presentaciones de libros tuvieron un buen marco de público, resultaron de interés y generaron inquietudes en los visitantes.
Quedó inaugurada la Biblioteca Braille y parlante “Silvio Velo” con un excelente marco de público cita en Ituzaingó 857, enmarcada dentro de la propuesta de actividades de la Feria del libro.
Un pequeño Stand del artista Yoyi Villafuerte fue muy visitado por su imponente colección de posters y postales con sus conocidos motivos automovilísticos.
Este año se expusieron aproximadamente 15.000 títulos, tarea que no es sencilla de realizar. Los libreros se mostraron muy conformes con las ventas principalmente apuntada a cuentos y libros infantiles. Desde la organización también arrojan un resultado muy positivo, principalmente por la buena respuesta, y aseguran que van por más para la quinta edición.