Otros tres “kioscos de drogas” desbaratados en el Hermano Indio
La Fiscala Ramos logró convertir en detención la aprehensión de tres jóvenes en ese barrio, acusados de comercialización de estupefacientes. Ahora, la investigación procura establecer los contactos con la banda apresada durante un megaoperativo que incluyó hasta helicópteros y cuyos imputados esperan el juicio en libertad.
Seis meses y medio pasaron desde el megaoperativo que, con helicóptero incluido, desbarató en el Hermano Indio una banda dedicada a la venta de drogas. A esos 12 allanamientos, con ocho detenidos que luego recuperaron la libertad y siguen imputados a la espera del juicio, se sumaron tres la semana pasada en la misma zona, con más detenidos y una investigación que busca los puntos de contacto entre ambos casos.
La Fiscala Viviana Ramos reunió los elementos suficientes para que el Juez de Garantías Ricardo Pratti autorizara tres allanamientos en domicilios del barrio, en inmediaciones de General Pueyrredón y Javier Rivero. En cada uno de esos lugares funcionaba, de acuerdo a la investigación, un “kiosquito” de drogas.
El operativo estuvo coordinado por personal de la DDA San Nicolás y contó con apoyo de efectivos de la DDI, el GAD y la Comisaría local. Los resultados, esta vez, fueron positivos.
Secuestraron 12 gramos de cocaína que estaban preparados en 18 envoltorios, para su entrega a los clientes; 135 gramos de marihuana; 16 proyectiles calibre 22; más de 2.000 pesos en efectivo; y un total de ocho celulares cuya pericia será fundamental para el futuro de la causa.
Luego de que Ramos tomara declaración a los tres aprehendidos, el Juzgado accedió a que se los considere en calidad de detenidos, por lo que la Fiscala tiene ahora unos 30 días para reunir los elementos que le permitan solicitar prisión preventiva para los acusados.
Los tres detenidos están imputados por comercialización de estupefacientes y sus nombres ya aparecían en otras causas, lo que agrava su situación procesal, explicaron desde Fiscalía.
Se trata de jóvenes que eran mencionados en escuchas telefónicas y sobre quienes pesaban sospechas y vinculaciones relacionadas al delito de venta de drogas, aunque en cada allanamiento que hubo en el barrio lograban “zafar” porque no les encontraban elementos.
Por lo pronto, la causa en la que están imputados corre de manera paralela a la de la banda del megaoperativo del 2 de junio pasado. De todas maneras, la sospecha de la Justicia es que el territorio no podría estar dividido. Si bien no hay vinculación directa aún para considerar que formaban parte de la misma asociación ilícita, Fiscalía no descarta esa posibilidad.