“Ojalá que el fútbol femenino pueda seguir creciendo”
Clara y sensata. Contenta por su presente y orgullosa por todo lo que consiguió en los últimos años, Ludmila Manicler, que hoy viste la camiseta de Boca Juniors, dialogó con La Opinión. Contó cómo fue su paso por el Barcelona, qué significa jugar para el equipo “xeneize”, recordó el gol que convirtió en los Juegos Olímpicos y habló de lo difícil que es jugar al fútbol en una sociedad “tan machista”.
De alguna u otra manera Ludmila Manicler siempre se gana un espacio entre los deportistas destacados de San Pedro. En esta oportunidad su presente en Boca Juniors y la victoria en los dos primeros partidos del campeonato la pusieron en foco de las cámaras de televisión de Fox Sports y ESPN que la siguieron, durante varios minutos, luego de jugar un fútbol tenis con el plantel masculino de primera división del club “xeneize”.
“Hace dos meses que estoy en Boca”, contó Manicler y dijo estar tranquila porque ya conocía a la mayoría de las jugadoras del plantel por haber formado parte del seleccionado argentino junto a muchas de ellas.
En el debut del torneo de primera división del fútbol femenino Boca venció a Platense por 13 a 0 con 3 goles de la sampedrina. “Nosotros salimos a hacer lo nuestro, siempre respetando al rival”, señaló Ludmila, e informó que en el segundo cotejo ante el clásico rival, River, se impusieron por 3 a 1. Pese a no haber convertido ningún gol, Manicler resaltó que habían comenzado perdiendo por un gol en contra de Eva González y que su ingreso favoreció para dar vuelta el resultado.
“El llamado del Barça
llegó en el momento justo”
Es de público conocimiento que el fútbol femenino no tiene los mismos sueldos que el masculino, por ello muchas de las jugadoras trabajan, estudian y entrenan para poder subsistir. Con 23 años, Ludmila había tomado la decisión de alejarse del fútbol por un tiempo para comenzar a trabajar y a estudiar, pero mientras decidía qué hacer con su futuro la convocaron del Barcelona y no dudó en aceptar. “Era la frutillita del postre para mi carrera”, expresó Ludmila y dio a conocer que evaluó la propuesta con su padre quien la apoyó en todo momento y hasta la acompañó unos días en España para que la adaptación no fuera tan difícil.
“Hice temporada 2011- 2012 y tuvimos la suerte de poder salir campeonas”, resumió Manicler quien puso sobre la balanza la posibilidad de jugar la Champions junto al plantel del Barcelona o volver a estar cerca de su familia. Los afectos pesaron más, se tomó un avión y decidió continuar su carrera en Argentina.
El gol en los Juegos Olímpicos
sigue siendo inolvidable
En un año olímpico es imposible no preguntarle a Ludmila cómo recuerda el gol que convirtió para Argentina en Beijing representando a su país en un Juego Olímpico. “No te lo olvidas nunca, fue inolvidable”, dijo entre risas y recordó que no sólo fue su primer gol sino que fue el primero en la historia del futbol femenino del equipo argentino.
Ahora que está en su país ve con otros ojos la posibilidad de volver a vestir la celeste y blanca: “Me quiero dar otra oportunidad”, aseguró Manicler que sabe que para volver a entrenar con la selección deberá hacer grandes sacrificios y combinar muchos horarios.
“No quiero terminar mi carrera sin antes volver a jugar un mundial o un Juego Olímpico”, indicó la sampedrina quien se mostró contenta por el crecimiento que ha tenido el futbol femenino en el último tiempo y finalizó: “Vivimos en un mundo muy machista pero la mujer debe practicar fútbol si es lo que realmente le gusta.
Yo conocí muchos lugares y personas por este deporte y no me arrepiento de haberlo hecho. Claro que no se puede vivir de esto, pero eso es lo de menos, con el fútbol gané cosas muchas más importantes”.