Obra en el Estadio Municipal: qué se proyecta para una segunda etapa, además de luz artificial en la cancha de fútbol
En el proyecto que diagramó Ramiro Sánchez Negrete y para el que se necesitará otro subsidio se mencionaron las fachadas de calles Belgrano y Mitre y sus respectivos accesos; un nuevo playón deportivo y obras en las piletas, entre otras.
“El tema de la iluminación hay que hacer todo nuevo, no sólo la instalación, y sale caro. Ramiro (Sánchez Negrete) hizo un presupuesto en su momento que rondaba entre los 10 y 15 millones de pesos. Vamos a gestionar eso también con Matías (Lammens) que hemos hecho buena relación”, respondió Cecilio Salazar cuando La Opinión le consultó porque la instalación de luz artificial en la cancha de fútbol del Estadio Municipal no se incluyó en la obra que se realizará con los 15 millones de pesos que entregará el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación y, tampoco, se desarrolla con dinero del Fondo de Promoción del Deporte.
Esa segunda parte del plan a la que se refirió el intendente fue detallada por el saliente funcionario (desde este miércoles el Director de Deportes es Mariano Arnal) en el presupuesto de 28 páginas que confeccionó y convenció a Matías Lammens: “Se cotizó un planteo de iluminación general, que se compone de cuatro columnas de luminarias de mercurio halogenado, definidas a partir de un estudio en el sector y posterior armado de proyecto lumínico”.
Y, enseguida, siempre en el escrito, aclaró a las autoridades nacionales: “Este planteo no se encuentra incorporado al presupuesto global que se presenta en este proyecto”.
Además, se proyectaron remodelaciones en las fachadas de calles Mitre y Belgrano. Sobre la primera, explicó: “La fachada que da a calle Mitre se encuentra en la actualidad muy descuidada y desprolija, sin contar con un orden ni una composición integral de fachada. Se plantea realizar una cortina de chapa perforada a lo largo de la cuadra, que unifique y componga la fachada, dándole al Estadio la jerarquía necesaria ya que actualmente carece de importancia y protagonismo”.
Al igual que la de la calle principal, la fachada de Belgrano no se incluyó en la primera etapa por su “alto costo”. Allí “se plantea continuar con el cerramiento de chapa ciega de colores elegida para toda la manzana”, colocar un “portón de servicio de ingreso secundario que no rompa con la lectura continua de la fachada”.
La meta del Gobierno local a largo plazo es construir “un nuevo playón deportivo” sobre el mismo que está detrás de la tribuna techada. “Se nivelara y mejorará el piso existente que actualmente se encuentra quebrado. En ese mismo sector se propone cambiar el equipamiento urbano (mesas, bancos) por unos nuevos y realizar trabajos de jardinería para realzar el sector de ocio y descanso”, señala el proyecto.
Por último, se planifica una nueva obra en las piletas que a fines de 2020 se arreglaron las filtraciones de agua por grietas. Se quiere “rellenar” la más grande para “dejarla de una altura menor”, es decir, que sea menos profunda para “aprovecharla mejor para diferentes actividades”. Para cerrar ese sector, se propone “cambiar el alambrado perimetral por un cerramiento de tubos redondos verticales”.
Para las obras mencionadas, Salazar admitió que golpeará nuevamente la puerta a Lammens en busca de otra respuesta positiva que, en definitiva, sea en beneficio de la comunidad deportiva de San Pedro que desde hace años pide la restauración del predio más importante que, alguna vez, fue “ejemplo” para muchos municipios.
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