Nuevo destino para las areneras
Finalmente se firmó la reubicación territorial de las areneras que funcionan dentro de los terrenos del Puerto. En pocos meses se trasladarán sobre uno de los laterales de las oficinas del Consorcio.
Tras varios meses de negociaciones e incertidumbre, tres empresas areneras serán reubicadas en los terrenos pertenecientes al Consorcio de Gestión del Puerto de San Pedro.
En la noche del Viernes, durante una reunión realizada en la sede de la Sociedad Rural, los Directores integrantes del Consorcio y los empresarios vinculados al rubro, firmaron el citado traslado territorial de las areneras. Incluye a la Arenera del Litoral, Pedro Spósito y Morresi y Quinteiro, y Silos San Pedro.
Los comercios dedicados al mencionado rubro tenían sus permisos vencidos desde 1.999 y era necesario un encuadre legal que le de mayor rigurosidad a la operatoria del puerto, ya que estaban ocupando territorio provincial.
Puntualmente se reubicarán en el área donde en la actualidad desempeña tareas la Arenera del Litoral, al pie de la barranca, sobre uno de los laterales de las oficinas del Consorcio y tendrán a disposición una superficie de 4.000 metros cuadrados. Es decir que el resto de las empresas deberán dejar los sectores que ocupaban, entre la Ruta 191 y el río.
Sobre esas áreas se podrán hacer las inversiones que se crean precisas y el Consorcio realizará las obras necesarias para darles comodidad a cada una de estas. Por ejemplo los accesos, las plazoletas y el estudio del suelo en donde se levantarán los silos. Esto tiene que ver con una ordenanza municipal que obliga a las araneras tener que contar con este sistema desde Enero del año que viene, ya que la misma indica que el refulado de arena se debe hacer sobre silos. En cuanto a este punto, no está confirmado que se cumpla a principios de 2.009, aunque se trabajará durante todo el año para finalizar lo más pronto posible.
“Esta firma predispone al Puerto a tener liberada su posibilidad de hacer inversiones; por ejemplo el sector de atraques de barcos. Esto era lo que había que resolver para hablar del crecimiento del Puerto, es por eso que se buscó el consenso para que nadie se vea perjudicado”, aseguró el Intendente Mario Barbieri.
“El puerto de San Pedro tiene una particularidad y es que es un puerto muy pequeño. Es por eso que no sólo firmamos con las areneras sino también buscaremos un acuerdo con el Club Pesca y Casting. Necesitamos espacio para disponer y hacer nuevas inversiones de carga y descarga de mercadería de importación y exportación”, dijo Mariano Veiga, Presidente del CGPSP.
El sector de atraque de los barcos areneros contempla la unión de los dos espigones, es por eso que habrá que pensar en el emplazamiento de una obra de magnitud ya que los barcos deberían atracar con la proa aguas arriba, mirando hacia Pesca y Casting. Allí hay un muelle perteneciente al viejo puerto, pero habrá que readecuarlo para hacerlo operativo. Se buscará apoyo económico y para eso se está trazando un proyecto para presentar en el Ministerio de Economía. No caben dudas que lo acordado con las areneras abre un nuevo capítulo en la historia del Puerto y un futuro promisorio con respectos a los proyectos que allí se puedan establecer.
La playa para los privados
En la misma reunión se confirmó que el predio perteneciente al CGPSP, que está entre Mansa Lyfe y Pesca y Casting tiene dos propuestas para realizar un emprendimiento turístico. Entre ellos el ya conocido proyecto del Hotel San Julián.
Eso se evaluó porque ese lugar no tiene ni frente, ni espejo de agua como para utilizarlo para carga y descarga. Según Veiga “Se podría utilizar como fuelle entre la actividad portuaria y turística”.
Además, un grupo de alumnos del último año de la carrera de arquitectura vendrán a estudiar el Puerto y a buscarle una solución mediante un convenio a firmar con la Universidad de Rosario.
En cuanto a la posibilidad de contar con el predio que hoy ocupa el Club Pesca y Casting, la situación es mucho más complicada ya que en la Asamblea realizada hace un mes atrás, los socios coincidieron en no mover la institución de ese lugar y “resistir como sea”. El Consorcio pidió un canon superior a los 9.000 pesos para el alquiler del predio, contra unos 700 que abonaba habitualmente el club. Existiría una contraoferta que sería un precio muy por debajo de lo exigido por el Consorcio, de todos modos se aproxima una puja legal que quizás se extienda mucho más allá del período que necesita el Puerto para un futuro proyecto.