No entiendo qué quiere el agro
Acerca del conflicto con el agro, creo que el gobierno sí escucha al campo y responde a sus requerimientos: los hizo en principio cuando estaba Martín Lousteau y dió las seis medidas de compensación respondiendo al que parecía ser el mayor reclamo y que se refería al de los medianos productores; el agro no quedó conforme porque no se redujeron las retenciones; esta semana que pasó se dio un nuevo esquema que disminuye sí la retención a la exportación de cereales. No entiendo qué es lo que el agro quiere. He comentado esto inclusive con familiares y amigos que se dedican a la tarea agropecuaria y me dicen, “es que el gobierno después no cumple”, o “es que el Gobierno se roba todo”, entre otras, de ser así, por lo que tiene que luchar la ciudadanía es porque el gobierno cumpla con las medidas que decide aplicar y controlar que no se robe nada. En mi opinión hay mucha gente que se suma en sus palabras a “apoyar al campo” sin saber cabalmente por qué. Lamento que el gobierno no haga una tarea más didáctica al respecto. Aplicar las retenciones a las exportaciones que se estipulan, opino que es una medida, que además el gobierno tiene soberanía para establecer, porque es una forma de defender nuestro suelo, no es solamente soja lo que se exporta, se exporta el suelo, es suelo rico y argentino y debe redituar en beneficio de todos los argentinos, sí coincido con que es un mecanismo de redistribución de la riqueza; después, en todo caso si esta redistribución no es visible o tangible, ahí hay que salir a hacer piquetes, no sé por qué al agro no le gusta la palabra, si, si es un piquete. Yo, que no soy peronista ni K, sino que creo estar bastante más a la izquierda que todo eso, quisiera de todo corazón, que la gente tuviera en su mesa de cabecera “Las venas abiertas de América Latina” de Eduardo Galeano y que aprendiera de la historia, de qué manera, las mono producciones, ya sea minerales o agropecuarias, dejaron en su paso por nuestras tierras riquísimas, el tendal de pueblos fantasmas, yermos y en la miseria más espantosa, que vean también en el panorama de la historia cómo los períodos de libre cambio, la disminución o abolición de impuestos dieron como resultado, el enriquecimiento económico desmedido de unos grupos y la pobreza de las mayorías, sobre todo la muerte de las provincias del interior. Hay tanto para aprender que el testimonio de la historia es fundamental, leer cómo era Paraguay antes de que los destruyamos con la guerra de la Triple Alianza, por qué Felipe Varela o el Chacho Peñaloza, por qué las independencias de los virreinatos y cuáles fueron los resultados, qué pasó con Potosí, Ouro Preto, qué pasó con los gauchos cuando los saladeros de carne, por qué los sueños de Artigas y la Patria Grande fueron incinerados, qué tal el proteccionismo de Rosas que aguantó hasta que rompieron las cadenas en Obligado, en qué se convirtió el fértil el nordeste brasileño, Haití. Hay más. En definitiva creo que las retenciones, las compensaciones y el esquema que plantea el gobierno, es un esquema visionario que va más allá de algunos intereses locales que están arrastrando tras de sí a personas que no terminan de darse cuenta de que aplicar estos tipos de políticas favorece al país en su totalidad, claro está, si el esquema se cumple, sino, hay que salir a gritar pero por otra cosa. Un abrazo! María Taurizano. e-mail: mariataurizano@hotmail.com.ar