Niña “poseída”: Todo apunta a que Milagros sufre un cuadro de esquizofrenia
Fuentes del nosocomio re-velaron a La Opinión detalles de la noche en que la menor “poseída” fue atendida en el sector de pediatría, donde permaneció un día internada. La madre de la pequeña recibió a un periodista de este semanario en su casa y reconoció que están buscando un psiquiatra para niños, ya que ninguno de los médicos de la ciudad cuenta con esa especialidad; y volvió a insistir con la presencia de un alma maligna en el cuerpo de su hija. Qué dice la madre, las reacciones de su hija, la opinión de los exorcistas y la palabra del Padre Héctor.
La salud de la pequeña Milagros mantiene en vilo a la ciudad desde hace una semana, cuando a través de FM Génesis su madre, María, hiciera un pedido desesperado de ayuda asegurando que su hija fue poseída por un “alma maligna” luego de compartir un pijama party con amigas del barrio –y no compañeras del colegio como trascendió en un principio– donde habrían jugado al juego de la copa. “Desde esa noche, Milagros no volvió a ser la misma”, aseguró.
El calor era agobiante y las copas de los árboles apenas se mecían cuando La Opinión llegó hasta la casa de la pequeña Milagros. La niña, la cuarta de seis hermanos, de apenas 12 años, estaba sentada en una reposera algo desgastada por el paso del tiempo, a la sombra de un árbol, frente a su casa y rodeada de su familia. Tenía las piernas alejadas del pasto que abarcaba la humilde vereda, retrotraídas sobre la reposera, los talones de sus pies apenas apoyados en el borde de la estructura de caño y las rodillas a centímetros del rostro. El cabello recogido y la mirada perdida. Ninguna herida, al menos a simple vista. Frente a ella un automóvil, a ambos lados familiares y amigos, sus hermanos correteando a su alrededor. No se movió.
No levantó nunca la vista en los minutos que La Opinión permaneció en el lugar, tampoco habló. No despegaba sus ojos de su celular. Quien habló fue su madre.
“Estamos desesperados”, fue la frase que más se repitió durante la charla. María asegura que la personalidad de Milagros cambió hace una semana, luego de compartir una noche con amigas, en una casa cercana a su vivienda, donde las restantes niñas, y no así Milagros, habrían jugado al “polémico” juego de la copa.
“Yo nunca creí en estas cosas, pero ahora creo. Creo porque lo estoy viviendo, lo estoy sufriendo, toda mi familia está mal por esta situación”, expresó María mientras subía y bajaba la mirada al hablar. “De día está así”, explicó la mujer, respecto de la tranquilidad que demostraba la niña y agregó: “El problema es a la noche, tenemos que estar todos pendientes de ella. No puede ir al baño sola, ni mirarse en el espejo, es ahí cuando le agarran los peores ataques”.
La mujer sostuvo durante toda la conversación que “Mili, tiene algo adentro, algo no sé, como que la rasguña desde adentro y la lastima y ella grita y se desespera y no la podemos tener. Ya no sabemos a quién recurrir”.
María aseguró que la menor fue llevada a Rosario y bendecida por el reconocido Padre Ignacio, al tiempo que otras fuentes revelaron que la niña ingresó a una Iglesia de San Pedro, se colocó más de un crucifijo en su cuello, rezó, e incluso bebió agua bendita. Nada de esto la perturbó. “Encima los exorcistas están de vacaciones hasta Abril, asique necesitamos urgente alguien que la vea”, expresó la mujer.
Vecinos aseguraron además que un exorcista de La Plata fue consultado por la familia de la joven y que éste descartó que se trate de una “contaminación”.
Incluso que su propia madre haya reconocido que están buscando un psiquiatra de niños, da cuenta de que la propia familia no está cien por ciento convencida de que su hija esté “poseída”.
Las horas
en el hospital
Mili fue llevada por su abuelo y su madre hasta el hospital a media noche. Los profesionales que la atendieron diagnosticaron que las características de su estado daban cuenta de un brote psicótico. Pasó poco más de seis horas internada sin medicación –esto habría sido por pedido de la familia-, quienes además firmaron el alta cuando notaron que la menor había mejorado y se retiraron del nosocomio antes de que sea diagnosticada por profesionales del área de psiquiatría. Aún no fue atendida por especialistas y su madre, con el respaldo de un importante empresario sampedrino, ya piensa en un viaje a Uruguay para entrevistarse con el Padre Barrera, cura sanador que pasó por San Pedro en el mes de diciembre y brindó una misa en la Iglesia Nuestra Señora del Socorro ante una multitud.
El juego de la copa
Fenómeno paranormal, juego de adolescentes o chiste de mal gusto, el juego de la copa atrae, despierta curiosidad. La idea de que con una copa boca abajo alrededor de un abecedario puede contactarse con espíritus ha sido abrazada por el ocultismo desde tiempos inmemoriales.
Para algunos es la forma de comunicarse con familiares o amigos fallecidos; para otros, un divertimento sin consecuencias; también están quienes se lo toman muy en serio y manifiestan su preocupación por la presunta “invocación”, que puede provocar apariciones e incluso el riesgo de una posesión.
Para la ciencia, no es más que el llamado “efecto ideomotor”, un fenómeno que permite generar movimientos automáticos de manera inconsciente, que en el caso del juego de la copa provocarían el ir y venir de letra en letra, que forma las presuntas oraciones del “invocado”.
Cadena nacional
El caso tomó estado público no sólo en la ciudad sino más allá. Muchos medios nacionales se hicieron eco y reprodujeron las declaraciones de la madre de Milagros. Además, canales de televisión llenaron minutos de aire con presuntos analistas que opinaron a la distancia y de manera genérica.
Parapsicólogos, “especialistas” en exorcismo, sacerdotes y opinólogos varios pasearon sus discursos por sitios web, diarios, estudios de radio y televisión. Pocos recordaron que Milagros es una chica de 12 años, que su familia está desesperada porque no saben de qué se trata, que luego de esta crisis la vida sigue.
Al contrario, muchos dieron por probada la presunta posesión demoníaca y apenas si les faltó hablar del anticristo y el apocalipsis. Lamentablemente, esas exposiciones suceden porque un sector público reclama el morbo que muchos medios les ofrecen con el rating o el contador de lecturas como horizonte.
El brote psicótico y esquizofrenia
Los brotes suelen ser temporales y pueden durar un minuto, un día, o varios días consecutivos. Es uno de los síntomas más habituales de la esquizofrenia, aunque especialistas aseguran que existen los brotes aislados, independientemente de dicha patología. “Son cuadros que se superponen”. La esquizofrenia es un cuadro de psicosis de larga duración, mientras que un brote es una manifestación abrupta de lo que podría considerarse la “sintomatología positiva de la esquizofrenia” durante un breve período. Es considerado “positivo”, ya que el “síntoma se manifiesta”. Este puede ser aislado y puede no estar asociado a ninguna enfermedad mental. Generalmente se dan en personas que atraviesan situaciones graves de estrés, o producto del consumo de drogas.
Los especialistas pondrán el ojo en la noche de la pijamada ya que una de las hipótesis es que el juego de la copa podría haber sido la causa del posible brote psicótico ya que es una enfermedad “silenciosa” hasta la etapa vital en la que se manifiesta, y precisamente es la adolescencia la etapa más propicia para el desencadenamiento del cuadro.
Las diversas fuentes que consultó La Opinión dentro y fuera de la Iglesia Católica, coinciden, incluso sin haber visto a la pequeña, en que la niña “necesita atención médica y no espiritual”. Aun así, su madre insiste con que necesitan de “una persona que haga lo que tiene que hacer”, en alusión a un exorcista.