Naranja sampedrina, la estrella del fin de semana
Pasó la primera Fiesta de la Naranja de Ombligo y dejó un sabor dulce en el balance de los organizadores. Turistas y sampedrinos disfrutaron de la iniciativa que busca revalorizar la producción citrícola que prima en el imaginario de aquellos que escuchan el nombre de nuestra ciudad.
Con dos jornadas de actividades en la Plazoleta Fray Cayetano Rodríguez, excursiones por establecimientos y montes frutales, y una oportunidad para debatir el futuro del sector, la primera Fiesta de la Naranja de Ombligo dejó contentos a organizadores y al público que visitó, degustó, bailó, compró productos y se llevó naranjas sampedrinas de regalo.
“Para mí el balance es superpositivo. El clima ayudó un montón, la gente estaba predispuesta a relacionarse con este producto”, consideró la directora de Turismo, Marcela Cuñer, que conduce el área que junto a Producción y Cultura de la Municipalidad organizaron la fiesta por iniciativa de la Cámara de Turismo con Solana Font a la cabeza, con acompañamiento de diversas entidades relacionadas a la producción citrícola.
Hubo competencia de embaladores, demostraciones gastronómicas, stands de artesanías y productos sampedrinos, talleres para niños y un escenario por donde pasó el sábado la banda de cumbia Supersound, y el domingo el folklorista Keko González. “No quisimos que el escenario tuviera el principal atractivo, sino que el atractivo sea el producto, y tener horarios con propuestas para todo el grupo familiar”, explicó Cuñer.
Durante ambos días hubo recorridas gratis en una combi alquilada para que locales y turistas conozcan los pormenores de la producción de naranja, y cerca de 15 locales gastronómicos ofrecieron platos con la fruta como ingrediente.
“En uno de los restaurantes tuvieron más de 30 pedidos de este plato que propusieron. Hubo un 99 % de ocupación hotelera cubierta. Muy conforme con todo el fin de semana. El viernes hablé con 6 radios de Buenos Aires. La gente pide la Fiesta de la Rosa, la Fiesta del Durazno, pero con tiempo lo charlaremos y veremos cómo seguimos adelante”, resumió la titular de Turismo.
Dinamizar el consumo
Una de las iniciativas más interesantes que tuvo lugar en la plazoleta fue la degustación de naranjas peladas a cargo de los profesionales de Inta Claudio Budde, Julieta Gabilondo y Cristian Pujol. Con la premisa de que “hay gente que no consume naranja porque tiene cierto rechazo a pelarla”, los ingenieros del organismo intentan llevar la tecnología de “pelado enzimático” —que en otros países utilizan hace tiempo para comercializar fruta— para aplicarla a variedades locales y producir en origen una naranja que se vendería envasada como snack o postre saludable. “Se sumerge la naranja, se hace vacío en la solución donde está la enzima, que ataca las células de la parte blanca de la naranja y retiro la piel; la cáscara se tira y se presenta. Es lo que se denomina la cuarta gama. Una especie de valor agregado”, explicó Budde al aire de Sin Galera el sábado.
La investigación de Inta, que ahora se ocupa de determinar cuánto tiempo se tiene para consumir el producto una vez pelado, tuvo este fin de semana participación de quienes se acercaron a puntuar el sabor y el aspecto de los cítricos.