Mosteiro: “Hoy, no tenemos un número abierto las 24 horas para atender a las víctimas”
La Secretaria de Desarrollo Humano respondió a las múltiples críticas recibidas por la UCEFF y el Servicio Local por su funcionamiento ante casos graves. Anoche se votó un pedido de informes en el HCD. Dijo que la línea que antes funcionaba “la usaban para reclamos de obras públicas y perros sueltos”. Y explicó el protocolo que se sigue en la actualidad.
La Secretaria de Desarrollo Humano, Verónica Mosteiro, respondió a las críticas que recibieron la UCEFF y el Servicio Local, desde distintos sectores de la comunidad, por su intervención (o la falta de ella) en casos de extrema urgencia.
Anoche, se votó un pedido de informes relativo al manejo que tuvo el organismo del caso Tiara, y a otras situaciones que se generaron en los últimos tiempos. La funcionaria explicó el protocolo actual de funcionamiento, en declaraciones formuladas a través de La Radio.
“Tenemos dos teléfonos celulares, cuyos números están en poder de la comisaría, el hospital, la Fiscalía, todas las instituciones que abordan la problemática de la violencia de género”. Una vez recibida una comunicación relacionada con un caso de violencia o abuso, precisó, “inmediatamente se ponen en contacto con UCEFF y con el Servicio Local, que dependiendo de la situación acuden a asistir a la víctima y generan estrategias de acompañamiento”.
Cada caso se analiza de forma diferenciada: “ Si fue una cuestión de abuso sexual pasa por Salud, y se determina si queda internada. Si no hay golpes, pero hay algún tipo de agresión psicológica o amenazas, la víctima es conducida a un refugio”.
Sin embargo, el principal problema de comunicación, la falta de una línea directa, no tiene visos inmediatos de solución: “Vos no tenés un número abierto las 24 horas al público. Un número que trabajamos entre todos es el de la mesa de violencia. Pero en su momento se determinó que no era funcional tener un número que todo el mundo utilizara (como el 422000) a la hora de dar respuestas a los casos que eran graves”.
Para Mosteiro, esa línea “terminó siendo un teléfono que se usaba para obras públicas, por si había perros sueltos y no para dar respuestas a los ciudadanos en cuestiones de abuso sexual, golpes o derechos vulnerados”.
La titular de Desarrollo Humano reconoció que “no se llega con la urgencia que deberíamos”, y atribuyó esa situación a la falta de personal: “Uno que ha pasado por servicios educativos con un gabinete psicopedagógico con tres personas en escuelas con 350 chicos, sabe que no alcanza. Imaginate con 6 personas en el Servicio Local para 70 mil habitantes. Estos dos servicios están casi a diario viviendo al límite de estas situaciones, que pueden terminar mal. Ingresan por mesa de entrada entre cinco y seis oficios diarios, lo que implica tener 200 oficios, un problema agudizado y agravado por el paro de la CICOP”.