La historia de Lili llegó a La Opinión de la mano de su nuera, Ivana, que quiso mostrar el proyecto que idearon luego de que la cuarentena complicara su trabajo como ayudante de cocina.
"Ella tiene 58 años. Trabajaba como ayudante de cocina preparando viandas para una clínica y para un negocio, que luego cerró. En la primera semana de cuarentena quedó sin trabajo y dijo 'algo tengo que hacer', entonces empezó a practicar. Primero haciendo cubrechifletes y luego barbijos", contó Ivana.
Con ayuda de su nuera, que conoce muy bien cómo promocionar sus productos en Facebook, Lili empezó a ocupar las tardes sentada en la máquina de coser. "Antes cuando tenía trabajo aprovechaba la tarde para dormir una siestita. Ahora está a full", explicó.
El trabajo es constante y las ayuda a ocupar el tiempo. "Hoy está feliz porque la gente se va contenta con los tapabocas y nosotros estamos felices por ver a ella cosiendo con tantas ganas". Los tapabocas que confeccionan son de doble tela, lavables, y vienen de diferentes estampas y colores, para niños y adultos. Se pueden pedir al 3329469928.