“Micro Cultivos” o cómo tener una huerta propia con poco esfuerzo
Desde hace dos años, Claudio, Stella Maris y el resto de la familia Moraga Tabaro trabaja en innovaciones que permiten la siembra en pequeños espacios y sin esfuerzo. Poco a poco, el emprendimiento va creciendo y hoy negocian con Brasil, Chile y Estados Unidos por las patentes de las innovaciones.
“Lo importante es que son innovaciones que permiten que gente que no tiene conocimiento y que jamás ha hecho una huerta pueda producirla en espacios mínimos”, explica Claudio Moraga Tabaro de “Micro Cultivos”, al referirse a su emprendimiento, que lleva ya dos años en la localidad de Pérez Millán.
Se trata de innovaciones que permiten tener en la propia casa las huertas que tenían los abuelos, aunque sin esfuerzo. La estrella de Micro Cultivos son las láminas de siembra directa. Se trata de un soporte orgánico biodegradable que contiene las semillas dispuestas a la distancia exacta una de otras para permitir su correcto crecimiento.
Stella Maris, esposa de Claudio, explica cómo funcionan: “Colocás la lámina sobre la tierra o maceta, le agregás medio centímetro de humus para cubrirla y la regás como a cualquier planta”. Así de fácil; y a los 3 ó 4 días ya comenzarán a crecer los vegetales de la huerta. Los más elegidos: rúcula, albahaca morada, rabanito, espinacas y lechugas.
Grandes soluciones para pequeños espacios
Las láminas de siembra directa son ideales para quienes tienen poco espacio o poco tiempo. Pueden ser sembradas hasta en un balcón. Sólo es necesario sol y agua para tener vegetales frescos.
Por ello, además de San Pedro y alrededores, los productos se comercializan en Rosario y Buenos Aires, donde los habitantes cuentan con espacios muy reducidos. Incluso en la página de la empresa familiar (www.microcultivos.com.ar) o al teléfono (03329) 492786, se pueden comprar “Estuches de regalo”, con unas 24 láminas y cuatro especies diferentes de cultivos.
Otras innovaciones
al alcance de todos
Además de las láminas de siembra directa, en Micro Cultivos han focalizado en otras innovaciones que posibilitan a quienes lo deseen tener una huerta con poco trabajo y mantenimiento.
Las “estacas de siembra” son uno de los productos innovadores de los que se enorgullecen Stella Maris y Claudio. Se trata de un vehículo que permite sembrar las semillas a la profundidad correcta, y vincular la humedad del suelo con la semilla.
Además, Claudio señaló que están trabajando en una nueva generación de sembradoras, superiores y más grandes que las actualmente conocidas: “Pero nada de grandilocuencias”, advierte.
Cultivo tradicional versus Micro cultivos
El sabor de lo producido en casa sigue siendo el mismo y tiene el mismo valor aunque pasen los años. Sin embargo, el ritmo de vida actual muchas veces impide que los habitantes de las ciudades tengan tiempo para destinarle a la producción de sus propios alimentos. Ese es el valor agregado que ofrecen los microcultivos.
“Actualmente se siguen promoviendo las metodologías de cultivo que usaban los abuelos hace cien años. El problema es que el tiempo que debe ser destinado a puntear una huerta hoy es inviable”, asegura Claudio, que considera que son los propios consumidores los que tienen que lograr que “se cambie el manual”.
“Con esto que decimos, podemos estar tocando intereses e hiriendo sensibilidades, que no quisiera, porque no es el objetivo”, aclara Claudio. No obstante, están todos invitados a probar las ventajas de los Micro Cultivos y disfrutar de productos frescos, recién sacados de la huerta.