Qué difícil aceptar que ya no estás entre nosotros… entre tantos amigos del Bar Plaza, inmigrantes y descendientes o entre los numerosos socios de tu querida Sociedad Italiana, a la cual brindaste tus mejores esfuerzos, esos que nacen del corazón.
Estoy seguro de que tu trayectoria como descendiente de inmigrantes italianos y, más aún como persona, no será olvidada. Siempre estarás entre nosotros.
Cuando partiste, aquel sábado 15 de septiembre, en el preludio de la primavera, muchas flores se abrieron, como un homenaje a quien se iba de este mundo, pero no de nuestro corazón.
Querido amigo, nunca te olvidaremos. Hasta que volvamos a encontrarnos en el cielo, y disfrutar de nuevo tantas horas felices.
Tu amigo,
Antonio Berardi.
San Pedro,
16 de septiembre de 2018