Médica del hospital se quejó por falta de insumos y Ramón Salazar le dio la razón
El mensaje de Stephanie Otero llegó a todos los rincones con su reclamo de elementos tan imprescindibles como los que se utilizan para el lavado de manos. Pidió jabón, bactericida y toallas de papel, entre otros elementos para atravesar la delicada situación actual. El intendente la llamó, le dio la razón e impartió instrucciones para que se solucione de manera inmediata. La profesional había destacado que el tema lleva largo tiempo sin solucionarse.
"Soy médica en el sector de guardia del Hospital Municipal de San Pedro, único efector público de la ciudad.
Me gustaría compartir con la población que no contamos con las medidas básicas para la madre de la bioseguridad, la higiene de manos", escribió en el primer párrafo de su posteo y luego preguntó "está situación no se da en el contexto de la actual pandemia que vivimos, sino desde mucho tiempo antes. Será muy costoso para el municipio invertir en jabón bactericida y toallas de papel?".
De allí en más se encendieron las señales de alarma entre todos los que tienen responsabilidades en suministrar, controlar e incluso dirigir los destinos del Hospital que por estas horas coordina un sistema de emergencias ante la pandemia de coronavirus y lo que menos necesita es que problemas sencillos de solucionar acarreen dificultades importantes.
"Debemos cuidar a la población pero sin los recursos básicos es imposible", indicó "pero acá seguimos, con jabón y toalla de dudosa procedencia".
Frente a la situación de alerta que se disparó no solo entre el personal sino en la población que comenzó preocupada a compartir ese mensaje, Ramón Salazar decidió evitar intermediarios. La llamó y le preguntó por todos los procedimientos previos a este reclamo para detectar responsabilidades.
Pasado el mediodía, Otero confirmó que efectivamente, había un compromiso personal de Ramón Salazar para que mañana esta situación se resuelva y que esperarán que así suceda. "Es importante decir que para coronavirus sí hay un mecanismo agilizado, aceitado; hay batas, hay barbijos, hay guantes", recalcó para que no se generen temores infundados en la población.
Frente a la sopresa que causó "el atajo" del jefe comunal para hablar con la profesional de manera directa, no hubo excusas suficientes en la cadena de responsabilidades que lograran morigerar algo que respondió a uno de sus allegados cuando lo consultó para saber si haría declaraciones públicas porque era evidente que la médica tenía razón y que se ocuparía de solucionarlo.