Marcha atrás del Gobierno por la tasa de Turismo
Los empresarios del sector se reunieron la semana pasada y manifestaron su desacuerdo con el nuevo gravamen de turismo incluido en la tasa de seguridad e higiene, que les significa un incremento muy importante. Habían decidido ir a la Justicia contra la medida y el jueves iniciarán el proceso de creación de una cámara. El gabinete anunció una reducción en las alícuotas, que desató la interna y alimentó los deseos de organización de este tipo de comerciantes.
La polémica por el aumento de tasas y la creación de nuevos gravámenes no cesa. Tiene a los prestadores turísticos como un actor relevante, puesto que después de muchos años de idas y vueltas han decidido constituirse en una cámara que represente al sector para defender sus intereses y emprender acciones conjuntas.
Es que el nuevo cálculo para la tasa de seguridad e higiene los toca directamente y hunde la presión tributaria en los bolsillos de los responsables de comercios de ese tipo, alcanzados por este nuevo gravamen que apunta a cobrarles jugosas sumas a los que explotan esta actividad.
Ante la creciente queja de los prestadores, ayer el Secretario de Gobierno Javier Silva sostuvo que la ordenanza está sujeta a eventuales modificaciones y consideró necesario un consenso con los actores involucrados.
“La idea del señor intendente es reunirnos con los diferentes sectores que serán llamados por el Director de Turismo”, expresó Silva y destacó a Fabián Bianchi: “Tuvo lo que tienen que tener los hombres, se presentó y se hizo cargo del sector que representa”, dijo.
Ayer por la mañana comenzó esa reunión para evaluar eventuales modificaciones a la tasa de seguridad e higiene en el apartado que corresponde a los mínimos para prestadores turísticos como hoteles, campings, bares y restaurantes.
Al respecto, Silva dijo que “está en danza el tratamiento de una baja en el porcentual que se va a cobrar por turismo, y también una readecuación a la aplicabilidad de esa tasa, de cómo se va a cobrar”.
La decisión de Guacone de revisar todo provocó un estallido de la sorda interna del gabinete, cuyo resultado es imprevisible pero tendrá serias consecuencias para alguno de los sectores en pugna, incluso al punto de poner en riesgo el acuerdo sellado entre el Intendente y Monfasani (ver páginas 4 y 5).
De cualquier manera, Silva dejó claro que fue una decisión de Guacone: “El señor intendente se ha hecho eco de los reclamos, comprende los problemas que podría acarrear para el sector y estamos trabajando en ese sentido”, aseguró.
Por la tarde mantuvo un encuentro con el Secretario de Coordinación Matías Monfasani, en procura de alcanzar un acuerdo al menos para la modificación de la tasa de turismo.
Defensa sectorial
La semana pasada La Opinión publicó lo que deberá pagar por mesa o plaza cada uno de los prestadores turísticos de la ciudad, de acuerdo a su categoría. Con ese ejemplar bajo el brazo llegaron al Centro de Comercio más de 40 operadores turísticos que se hicieron presentes para debatir qué hacer.
Durante ese encuentro desarrollado el jueves, acordaron lo que hicieron al otro día: ir a la sesión del Concejo Deliberante, que por falta de quórum no fue. “Queremos que nos voten el aumento en la cara”, dijo uno de los participantes.
Durante la reunión en el Centro de Comercio manifestaron su descontento por la fórmula y los alcances del nuevo gravamen, que rechazaron de manera contundente.
El abogado y socio de un emprendimiento hotelero Pablo Visca señaló ante los presentes que “no registra antecedentes una desproporción semejante”. Consideró que una vez aprobado es necesaria una acción judicial conjunta y aseguró que “es fácil” de ganar puesto que “el texto es de una vaguedad impresionante e impreciso”. De la misma manera, sostuvo que “hay confiscación y es inconstitucional”.
El también abogado Daniel Spirópulos aconsejó una presentación judicial que detenga la implementación de la medida una vez que sea aprobada. “Tiene que ser una medida efectiva que evite que el contribuyente quede en mora, considero que hay que adelantarse y presentar una acción declarativa de inconsitucionalidad y de certeza” y agregó: “Es inconstitucional por donde se la mire esta ordenanza”. Recomendó una medida cautelar.
Antes de que Javier Silva señalara que iban a revisar los importes a cobrar, los prestadores daban por perdida la batalla en el Concejo Deliberante e iban por los mayores contribuyentes, cuyo listado aprobado hace poco bajaron de la web para tomar contacto con ellos, que son quienes deben votar en última instancia las ordenanzas fiscal e impositiva.
Durante la reunión estuvo presente el Director de Turismo Fabián Bianchi, quien ya ese jueves avisaba que “se está trabajando políticamente en el tema”. Sin exponer explícitamente su desacuerdo, dio a entender que no aceptaría el modo de calcular la tasa y adelantó: “Si me tengo que ir a mi casa, me iré” (ver recuadro).
Mañana tendrán un nuevo encuentro con la intención de avanzar en la conformación de una cámara que represente a la actividad turística, algo a lo que se venían resistiendo los operadores hasta ahora. Tal vez ello posibilite evitar las dificultades propias de un sector que deja mucho que desear en materia tributaria, especialmente con la proliferación de emprendimientos sin habilitar.
Palabra de prestador
El empresario gastronómico Juan Alcorta sostuvo que la propuesta del Ejecutivio “no tiene ningún sentido” y cuestionó a Guacone: “El Intendente tiene tantas falencias en su Gobierno que pretende recaudar dinero de cualquier lado para pagar sueldos”.
“Esta es una administración nefasta que pretenden que parte del comercio cancele todas esas deudas”, señaló Alcorta, quien se quejó de que la presión tributaria caiga en “los mismos de siempre”. Cuando le tocó hablar en el Centro de Comercio, aseguró: “Yo no voy a aceptar ni al intendente ni a ningún concejal en mi negocio”, y convocó al resto de los prestadores a hacer lo propio con los que aprueben la ordenanza.
Por su parte, el dueño del hotel Eser Alberto Peyrot manifestó que el sector ya paga diversos tributos como para sumar uno más. “Lo que quieren hacer no tiene ni conversación, no se debería hacer”, se quejó y sostuvo que “no tendrían que hacer ninguna tasa nueva”.
También se refirió al tema uno de los prestadores más importantes de la ciudad: Alejandro Monjo. Dueño de los dos Howard Johnson que hay en la ciudad, es uno de los que más dinero deberá tributar si se aprueba la ordenanza tal como fue propuesta.
En diálogo con La Radio y La Opinión, Monjo sostuvo: “Me parece un absurdo cobrar una tasa por plaza” y consideró que “en San Pedro hay que ayudar al turismo, no perjudicarlo; porque es una generadora de turismo muy importante”. En ese sentido, sostuvo que el Estado debería estar más ocupado en generar nuevas fuentes de trabajo.
“Hay que crear y tener ideas, eso puede dar buenos resultados, pero este creo que no es el camino”, señaló el empresario cuyos emprendimientos pagarían 58.000 pesos por mes por las plazas que posee, a menos que facture más de 2.400.000 pesos mensuales, que le generaría un descuento para que abone aproximadamente 24.000 pesos por mes.
“Se llevan las camas o me las dejan”, bromeó Alejandro Monjo, quien deslizó que en cualquier caso deberá aumentar las tarifas para solventar los gastos. Pidió mejoras en los accesos a la ciudad y aseguró que los clientes “se quejan por escrito en el hotel”, en las encuestas que realizan, por lo que manifestó su acuerdo con pagar tasas razonables en la medida en que haya una contraprestación acorde.
Bianchi, entre la espada y la pared
Ante más de 40 prestadores turísticos, el Director de Turismo Fabián Bianchi habló unos minutos ese jueves por la noche, durante la reunión de los prestadores turísticos. Visiblemente angustiado, dijo: “Estoy tan preocupado como están ustedes”, e informó: “El intendente Pablo Guacone va a saber que me ha dado una responsabilidad y por mi familia, mis hijos y por ustedes fijé mi postura, ya la imaginarán; se las di por escrito a Guacone y a Casini”.
En ese sentido, aseguró: “Este es el peor momento que estoy pasando en mi gestión. Tengo mi postura muy firme. No me molesta volver a la calle, mis convicciones son y fueron claras. Las dejé fijadas al gabinete” y sostuvo: “Si me tengo que ir a mi casa, me iré, pero mi postura fue muy clara y concreta. Si no lo puedo lograr, les pediré a ustedes que me sepan disculpar, me volveré a mi casa; intenté hacer lo mejor posible”.
Informó que “hay gente trabajando políticamente en el tema”, en relación a reuniones que se realizaban durante la noche del jueves para intentar llevar al recinto el viernes al mediodía una propuesta alternativa. Ese viernes hubo reuniones. A Bianchi le dijeron en la cara que la ordenanza no se tocaba y que el que no estuviera de acuerdo tenía que irse.
El Director de Turismo dijo el jueves, repitió el viernes y reafirmó el martes que la iba “a pelear desde adentro”. Ayer comenzó esa lucha interna, cuyo final aún es abierto.
“En algún momento hablaré todo lo que tenga que hablar. Hubo noches enteras que no he dormido en las últimas semanas. A buen entendedor, pocas palabras”, dijo Bianchi.