Los daños por “la cola de un tornado”
Gobernador Castro y Vuelta de Obligado fueron las zonas más castigadas por las fuertes ráfagas de viento y lluvia que el pasado jueves azotaron la zona. Hubo voladura de techos y presencia de Defensa Civil en el paraje que recibió las primeras ayudas durante las primeras horas de la mañana y sobre el mediodía la sustancia potabilizadora de agua que proporcionó la Cruz Roja.
En Vuelta de Obligado estuvieron casi 24 horas sin suministro eléctrico ni comunicaciones de ningún tipo. Hubo gente que se retiró pese a que estaba alojada por su participación en Expoagro.
En San Pedro la caída de postes y rotura de cables provocó cortes en varios barrios. Sobre Lucio Mansilla y 11 de Septiembre, en Avenida Sarmiento y en Rómulo Naón, los daños fueron notables.
El transformador emplazado a media cuadra del Jardín Frutillitas quedó casi destruido y los trabajadores de la Coopser trabajaron a destajo durante toda la jornada para reparar los tramos más afectados.
En los barrios, la voladura de chapas o los colchones mojados fueron moneda corriente. “Me dijeron que le ponga una bolsa de plástico al colchón”, contó una vecina el sábado respecto a las instrucciones que recibió cuando sus habitaciones habían quedado a la intemperie por acción del viento.
El intendente llamó a funcionarios de la provincia y la ayuda llegó en menos de 24 horas. Alimentos, colchones, chapas y tirantería fueron depositados en el corralón municipal y en la Secretaría de Desarrollo Humano donde una vez más la falta de relevamiento y orden de urgencias quedó en evidencia.