Los aportes de un padre permitieron detener a un joven acusado de abusar de una adolescente tras una fiesta
El hecho ocurrió el domingo pasadas las 6.00 de la mañana. La joven le contó a su hermana y luego a su padre lo sucedido, por lo que radicaron la denuncia casi de noche. Las imágenes de las cámaras de seguridad y audios del acusado aportados por el hombre permitieron que la Justicia ordene su detención este martes por la madrugada, horas después de un allanamiento en su casa. Fiscalía le tomará declaración indagatoria.
La Policía detuvo este martes por la madrugada a un joven de 23 años acusado de abuso sexual que fue denunciado el domingo, luego de un episodio que ocurrió en su domicilio con una adolescente de 16 años a quien llevó desde una fiesta y que fue sometida a prácticas sexuales contra su voluntad.
Para llegar a la detención, fue necesario el aporte del padre de la víctima, quien se ocupó personalmente de reunir elementos probatorios suficientes como para que lograr esa instancia. Incluso tuvo que reclamar a la Justicia que ordene allanamientos y medidas de prueba, y hasta logró que una pericia fundamental no esperara días gracias a un contacto político.
Todo comenzó cuando la adolescente salió de una fiesta en la que el denunciado se desempeñaba como colaborador. Sus amigas se fueron con sus novios y él le ofreció llevarla en su automóvil. Ella accedió. Eran las 6.23 cuando llegaron a la casa de él. A las 6.45 se fueron. Así lo confirman las imágenes de cámaras de seguridad aportadas a la causa. En esos 22 mintuos ocurrió la situación de abuso que la joven denunció.
Cuando llegó a su casa, se duchó. Más tarde le contó a su hermana, mayor que ella, y luego a su padre. El domingo por la noche radicaron la denuncia y comenzó el proceso que derivó en la detención del acusado —sobre quien ya pesa al menos otra denuncia similar, por parte de una familiar—, que será indagado en Fiscalía en las próximas horas.
En la Comisaría de la Mujer recibieron la denuncia y rápidamente activaron los protocolos. El Servicio Local del menor tomó intervención y la víctima fue trasladada al Hospital para la profilaxis y la pericia médica, que tuvo sus demoras y sus bemoles: un llamado telefónico a un funcionario provincial de muy alto rango permitió acelerarlo.
Si bien la adolescente ya se había bañado y por su relato inicial acaso sería dificultoso que la revisación médica hallara signos de violencia, la inmediatez del examen, aunque habían pasado más de 15 horas, era importante. El resultado fue que no se hallaron lesiones, pero la causa de todas maneras es por abuso sexual con acceso carnal, por el tipo de prácticas a las que fue sometida la víctima.
La tarea inicial de la instructora judicial de la Fiscalía N° 7 fue secuestrar la ropa que llevaba puesta la chica cuando ocurrieron los hechos denunciados. El padre reclamó que deberían hacer lo propio en lo del acusado. Lo hicieron más tarde: el lunes allanaron la casa del joven para secuestrar sábanas y otros elementos, mientras que Policía Científica peritó su automóvil.
Por la noche, el padre de la adolescente aportó unos audios de WhatsApp que él envió a una amiga y que para Viviani fueron suficientes para solicitar su detención. Por las dudas, la fiscala dispuso una consigna policial en el domicilio familiar donde sabían que estaba, para evitar la fuga.
En los audios, el acusado reconoce que se mandó “una cagada”. Dice que no sabía que la joven era menor de edad, que estaba alcoholizado y que iba a “desaparecer de este pueblo de mierda”. En esos mensajes daba a entender que no iría preso y hasta explicaba por qué.
El Juzgado de Garantías emitió la orden de detención pasada la 1.00 de la mañana y la policía procedió al traslado del acusado a la Comisaría, donde quedó alojado a la espera de que Fiscalía lo convoque para prestar declaración indagatoria. La víctima deberá pasar por las pericias psicológicas de rigor previas a su declaración testimonial.
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