Las pistas del asesinato de Gomila dependen de las pericias
Las muestras y huellas que recolectaron en el lugar donde murió el productor y lo secuestrado en diversos allanamientos son cotejadas para determinar la vinculación de Ulises Fernández con el asesinato. La situación de su pareja, la acusada de “narcodocente” Silvina Sampol, es complicada. El Fiscal sospecha que el prófugo integraba una banda que perpetró al menos tres asaltos.
El Fiscal Marcelo Manso confía en obtener las pruebas necesarias para comprobar la participación de una banda local que asaltó y asesinó a Ariel Gomila el pasado 6 de febrero. Para ello se aguardan con expectativa los resultados de los análisis efectuados sobre huellas y manchas de sangre halladas en el lugar del homicidio y las viviendas allanadas en las horas posteriores al hecho.
La prueba más concreta, y que para la instrucción sería determinante, es el rastro hemático en una campera secuestrada en la casa de Ulises Fernández, pareja de la consejera escolar Silvina Sampol, sospechado de haber tenido algún tipo de participación en el asalto al vivero del paraje El Espinillo.
Fernández permanece prófugo de la Justicia, ya que sobre él pesa una orden de captura. Desde el momento en que fue detenida la docente no se supo más de él. Es más, se sospecha con firmeza que al fugitivo le avisaron del allanamiento y que tuvo tiempo de huir de su casa minutos antes de que la Policía arribara al lugar aunque la inmediatez del operativo no le dio tiempo para deshacerse de todos los elementos comprometedores que había en el interior de la propiedad.
El primer examen por el cual los investigadores aguardan los resultados es el comparativo entre las manchas de sangre extraídas del abrigo de Ulises con el grupo sanguíneo de Gomila, ya que en caso de arrojar resultados positivos se podría establecer que el prófugo estuvo en el lugar del hecho o bien alcanzó a ser herido por los disparos efectuados por el propio productor antes de fallecer.
Además de estos peritajes también se aguardan los resultados de la identificación dactiloscópica de personas, los rastros que fueron remitidos a las oficinas de la Afis (Automated Fingerprint Identification System) de Junín para comprobar si las cinco huellas dactilares encontradas en la casa pertenecen a algunas de las personas sospechadas de haber participado en el hecho y a quienes les tomaron muestras el día en que se allanaron sus viviendas. Estas son las únicas pruebas con las que contará el Fiscal Marcelo Manso para poder desentrañar el asesinato.
La “Banda de Ulises”
En el ámbito judicial de la región están seguros que son dos las bandas que desde hace tiempo operan en la zona comprendida por San Pedro, Baradero, Pergamino, Ramallo, Capitán Sarmiento y San Antonio de Areco. Extrañamente, no se han detectado ilícitos en jurisdicción de Arrecifes.
Ulises Fernández y compañía podría ser integrante de la banda que asaltó el vivero de Ariel Gomila y que luego le dio muerte tras enfrentarse a los tiros. Para los investigadores este grupo sería el autor de al menos tres hechos más cuyo dato mas saliente es la presencia de la camioneta Ford Ecosport negra que fue vista por un ocasional testigo en la madrugada en la que murió Gomila, sobre el camino real cercano a la propiedad.
Un rodado de similares características fue divisado en dos robos acontecidos en Santa Lucía y en el del paraje Las Bahamas, hecho por el cual permanece detenido el policía Daniel Lineros, quien fuera reconocido a través de las cámaras de seguridad como uno de los asaltantes del lugar. De todos modos, la falta de pruebas materiales hace imposible vincular al resto de los sospechosos con los ilícitos cometidos.
La otra banda, que en primera instancia se estableció que no tendría vinculación directa con el caso Gomila, es la que integrarían, entre otros, los detenidos “Tilito” Negrete y Julio César “Jambao” Torres, a quienes les secuestraron diversos elementos sustraídos en dos campos de Pergamino, en el marco de una serie de allanamientos posteriores al hallazgo de una camioneta robada en esa ciudad al día siguiente del asesinato del viverista, vaya casualidad, en proximidades de su vivienda de El Espinillo.
A esta banda se la vincula con varios de los hechos acontecidos en nuestra ciudad y la zona, como un robo que tuvo lugar hace pocos días en la localidad de Santa Coloma, partido de Baradero.
Sampol sigue tras las rejas
La consejera escolar detenida, acusada de “narcodocente” tras el hallazgo en su vivienda de cocaína y marihuana lista para vender, continúa detenida en Ramallo, donde la semana pasada recibió la visita de su hijo.
Allí habría dicho que no necesitaba nada y que esperaba con optimismo las gestiones del estudio de abogados Hugo Lima (h), que a través de la abogada Soledad Galarza presentó un pedido de excarcelación que fue rechazado y ahora aguarda la decisión del Juzgado sobre la prisión preventiva que a principios de marzo pedirá el Fiscal Manso.
La situación de la docente es complicada. En su entorno hay quienes aseguran que el argumento de que “sabía, pero no participaba” -para pedir la carátula excarcelable de “encubrimiento” es endeble. Tanto como su declaración inicial, en la que dijo que no tenía idea acerca de la droga que había en su casa.