Las estafas al consumidor se fríen en aceite
Al menos en dos supermercados seccionaron las etiquetas con los precios del aceite y los remarcaron. Desde la Sub Secretaría de Comercio de la Nación, dijeron que eso es irregular y que “hay que hacer la denuncia a Defensa del Consumidor”. Sepa quiénes y cómo se quedan con su dinero.
Lita de Lázari tenía razón, hay que caminar para conseguir buenos precios aunque en sus tiempos de gloria, no existía el estelar Guillermo Moreno. A fines de la semana pasada y antes de anunciar el absurdo 0,4 de inflación de acuerdo al INDEC, varios consumidores sampedrinos se dieron cuenta de que los envases de aceite de un litro y medio, que compraban habitualmente a $ 11, se podían conseguir a $ 5,30. La diferencia, en este caso es de más del cien por ciento, pero nadie entendía por qué.
El pasado 26 de Junio, la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández, ratificó el acuerdo realizado por la Secretaría de Comercio Interior, que dirige Guillermo Moreno y la Cámara de la Industria Aceitera. El mismo consta de políticas de compensación para el sector, según dijeron desde el Gobierno Nacional, con el objeto de mantener la estabilidad de precios de sus productos. Así, las compañías aceiteras consiguieron una vez más subsidiar la venta en Argentina, celebrando jugosos contratos.
De esta manera, se establecieron los precios para super e hipermecados en los aceites de soja, girasol y mezcla, en envases de 900 ml. y hasta cinco litros por período de un año.
Las empresas que adhirieron a este convenio, fueron la Asociación de Cooperativas Argentinas C.L.; Bunge Argentina S.A.; Cargill S.A.; LDC Argentina S.A.; Oleaginosa Moreno Hnos. S.A.; Molinos Cañuelas SACIFIA; Aceitera General Deheza S.A.; Molinos Río de la Plata S.A.; Nidera S.A.; Vicentin S.A. y Tanoni Hnos.
Todas ellas tienen el compromiso de etiquetar los productos que forman parte del acuerdo, con los precios a los que deben ser comercializados.
Las acciones de la FABA
La Federación de Entidades de Autoservicistas, Almaceneros, Supermercadistas y Polirrubros de la Provincia de Buenos Aires (FABA), es la encargada de resguardar los intereses de los comerciantes más pequeños. Es por esto que a los pocos días de resuelto el convenio por el precio del aceite, se reunieron con la participación de entidades representativas de comerciantes del interior. Entre las quince participantes, estuvo el Centro de Comercio en Industria de nuestra ciudad (CCeI). Roberto Seregni, fue el representante local, en una reunión que tuvo un solo objetivo, pedir un monto fijo de ganancia para la venta de los productos acordados, a favor de los comerciantes.
Es por esto, que la F.A.B.A., en una reunión de poco más de dos horas con el Secretario Moreno, resolvió que se aseguraría un margen de utilidad de 7,5% a los minoristas, monto que los mayoristas y distribuidores deberán cumplir estrictamente, acomodando los precios para que la rentabilidad del minorista se cumpla.
Los aceitosos precios de San Pedro
Por primera vez, desde que el estado subsidia algunos productos de la canasta básica, San Pedro, tuvo la oportunidad de obtener la oferta al igual que todo el país. El aceite Natura de 900 mililitros a un costo de $ 3,32 y el de un litro y medio, a $ 5,30, pudieron verse en las góndolas de varios supermercados. El problema, se da cuando al menos dos comercios de nuestra ciudad, recortaron una por una las etiquetas que vienen impresas en los envases. Es así, como el Supermercado Sarmiento (el mismo de la leche de planes sociales), vendía la botella de aceite Natura de la empresa AGD, a $ 7,99 porque eliminaba el precio establecido. Pero esto no quedó ahí, ya que una vez que el tema se dio a conocer a través del aire de La Radio, bajaron el precio a $ 6,99.
La maniobra realizada, fue considerada como inadmisible, pero mucho peor fue saber que hace sesenta días atrás, el precio del mismo producto superaba los diez pesos y por ende, miles de ciudadanos pagaron precios abusivos.
Exprese sus quejas
Vale remarcar que son varios los comerciantes de la ciudad que venden legítimamente el producto, con la etiqueta y al precio que indica, sin embargo, no se puede permitir que además de que los bolsillos de los ciudadanos los maneje el gobierno, también lo hagan los comerciantes, con tal de obtener un rédito a costa de la buena fe del cliente. Con gran sinceridad la dueña de un pequeño almacén confesó que su habitual proveedor, le ofereció el producto pero sin margen alguno. “Si querés el aceite te lo vendo al precio de la botella” le dijo a la mujer que, por supuesto, se negó a esa transacción que sólo la llevaba a perder dinero.
Ante la situación que se reitera en todas las ciudadaes, el representante del CCeI, dejó en claro que lo que se hizo, está mal. “La etiqueta la tienen que respetar y no la pueden remarcar… El comercio que recibe el producto con el precio y no lo cumple, esta violando este acuerdo y no lo puede hacer”.
Seregni, comentó que en el artículo 3 de la reglamentación que realizó la F.A.B.A. ante este convenio es bastante claro sobre las irregularidades. “Cualquier incumplimiento que se verifique en relación a lo anterior, deberá ser informado en forma inmediata a F.A.B.A. para que ésta proceda de acuerdo con sus facultades.
” Para ser más claros, cualquier comerciante y/o consumidor que se vea damnificado ante esta situación, puede hacer la denuncia en el Centro de Comercio, que es quien elevará el tema a la Federación.
Ahora bien, queda latente la segunda incógnita, quien fue el proveedor del producto. “No se de dónde salió el aceite, en Buenos Aires esa marca salió del mercado” dijo Seregni.
Mejor defenderse solo
Desde la Subsecretaría de Defensa del Consumidor de la Nación, expresaron claramente que las acciones que llevaron a cabo los comerciantes están mal y hay que denunciarlas. “Sacarle la etiqueta a un producto es irregular” afirmaron, aunque no dieron muchas opciones y garantías para que esto no vuelva a suceder y que los productos subsidiados para todo el país, sigan llegando. Indican que el consumidor debe ser el denunciante y ni siquiera se toma nota de los planteos que se realizan, dejando en claro que los acuerdos de precios sólo forman parte de la imaginación de los funcionarios de turno.
Por sólo mostrar un ejemplo, un conocido supermercado de la ciudad, se presentó con las dos botellas de Natura que tiene en oferta en su local y la factura del proveedor que le facilitó la mercadería pero sin margen alguno de ganancia
Si bien el titular del comercio no quiso revelar el nombre del proveedor, la factura indicaba con claridad que el precio mayorista es el mismo de venta al público.
Es demasiado claro que para quien llegó a vender el mismo producto a 11 o 12 pesos, hoy le resulta una vergüenza recortar la oferta para obtener una mínima ganacia. En Defensa del Consumidor, se mostraron sorprendidos ante las consultas y dijeron desconocer el convenio firmado por Moreno. Tal vez fallen las comunicaciones entre las reparticiones que tienen como misión garantizar el derecho ciudadano.
Cabe recordar que por la venta de leche de planes sociales y en una denuncia iniciada por el Centro de Comercio, hubo intervención judicial. Será bueno que ahora y “de oficio” alguien se ocupe de desenmascarar esta millonaria maniobra. Basta con multiplicar las botellas y las cajas que puede cargar un camión para advertir la escala de la estafa a la que está siendo sometido el Estado Argentino.